miércoles, 27 de enero de 2010

aSolar

Voy saliendo, despacio
y entro, lentamente
en un estado distinto.

Comenzando, cuento
que es lo que más tenía ganas.
No voy a explicarlo.

Primavera de amateur,
estrenando gramática.
A marzo, insolente!

No te escucho,
¿Qué me estás diciendo?
Y no te entiendo, ni prentedas
entenderme a mi,
pues no voy diagramarte
mis martes y jueves,
mis días grises,
las perdices que lloré
los errores que no quisiera
cometer, al detallarte
mi agenda, mi lunes
mis noches, mis sueños...

En el tiempo, deslizo
sobre el agua que despacio
llueve y moja el suelo
Garúa, el rocío me atrapa
y ya no existe el espacio.
Estoy flotando, mientras vuelo
revuelvo, estos escritos,
estas notas azules,
y no siento la presión....
no siento nada, y vivo.

Así funciona.
Con mi anarquía,
fuera de tu hegemonía.

Ni sé si funciona...
pero tu reinado me agobia.
Y yo que creía que,
cuando escribía...
Sabía que me olvidaba,
y padecía encontrar
el recuerdo que se esfumó.

No sé quién empieza,
sé quién termina.
Y lo detesto.
Por que tu sol,
me asola...
y ya no quiero más claves
de Sol, ni de Fa.

Dame, algo distinto de ti.
Tu quinta y tu séptima,
Ya estoy adentro...
Y esta vez, lo sé.
No va a ser imposible
continuar aquí.

lunes, 25 de enero de 2010

Solfeo

Intro

El herbaje, conjuro inevitable
embriaga la insensatez
la corroe hasta su diente mas fuerte.
La rompe, desamarra, le corta los pies.
Le resta, lo que la interpretacion le suma
Y divide, en uno reino mas, un reino más.

I

Quebrarte y apedrearte,
rasguñarte
tu latido incesante,
destronarme en la creciente,
y esta lluvia que cae sobre mis arrugas.

Rasgar tu superficie,
mapa político de mi vida
Destruir tu voz.
Bailar, con tu son
de fondo, alcanfor
florecer, por tu agua
y sin tu sed.

II

Otra vez en el espejo,
tu vitreaux en mis ojos
timonel de la mirada,
sentir la miseria detrás.

Y tu que no vacilas en tu paso
haciéndote presente en mis yerros
y tu que no dejas una hendidura
¿Por dónde me meteré?
que si me abrís las ventanas
me caigo por el otro lado
Y otra vez, volverte a empezar.

III

Práctico, ensayo, rescribo.
Recito, estudio, rejunto.
Atiendo, no entiendo....
¿Por que, sin palabras
me quedo, sino es por ti?
Porque es por ti que me quedo
sin palabras y de nuevo,
no sé como partirte y
de tu baúl, sacar mis letras.
Los dedos que le dan cuerda
a mi cajita musical...

Fin

Cuando la salida, está en tu reino.
Cuando la entrada, es la perdición.
Cuando perder... es la única salida.

sábado, 23 de enero de 2010

Solstar

Vertiginosamente entiendo que es imposible, desde ya.
en ligero declive, me olvido y sueño,
como imposible, soñar. Entonces, me adormezco
y allí no hay lugar para amarrar.

Como siempre lo supe, nunca lo sentí.
Esquivándole al tacto, huyendo a su suavidad.
Renovando ilusiones que vuelven a caer.
Parece apróposito que sólo allí pueda subsistir.

Y vivir, tan imposible, que quiero partir.
que me lleves allí, donde nunca fui.
Que me cuides a mi, sobre todo de mi.
Romper la distancia y dejarme anudar.

Comprendo, quizás demasiado pronto
que hasta aquí llegué y no sé cómo seguir
que estoy perdida, sucia y muda
que tengo miedo y no puedo gritar.
que mi sensibilidad me da asco,
y no hay con quien compartir
el papeleo que releo, y empecé a escribir
sobre este viaje cuando elegí partir.

Contarle al mundo más que billetes
y recorrer sus millas, mas que atravesar su cielo
es lo que más quiero yo.
Dejarme de mariconeadas,
de vueltas absurdar y miradas furtivas,
para finalmente, partir a ti.

miércoles, 20 de enero de 2010

Luz verdeagua

Sin exagerar, no comprendí qué hacía allí. No alcancé a prestar atención y ya estaba ante mi. Frenó su vuelvo fosforescente y parpadeó: nunca había visto una luciérnaga y fue sorprendente. Y después volar, entre la luz y la oscuridad, sobre los peldaños de las imágenes que se impregnaban en la memoria de un modo impenetrable.
En el compendio de este viaje, me reservo lo que sólo sentí y no puedo describir. Cada vez se ponía mejor; por momentos "dejá vu", por instantes renovación y a cada paso, un latido más y un cambio menos.

La suerte está echada. Le ganamos a la vorágine y esas luces mundanas, se volvieron senderos en la sombra, bichitos-faroles que imitaban a los ovnis, cristales que decoraban con fulgencia la tierra con estrellas destellantes. Aunque quise tomarle una fotografía se escapó, no hay manera de atrapar el momento en que la tierra destrona al sol...
Por lo demás, la unicidad, bastión de mi decoro racional. Me trajé de allí una tonada renga y varias palabras mal usadas, la última vez vi brillar en la noche la música que decoraba el silencio. Hoy en baires, festejo con familia, duermo con mi gata y espero la espera de un concierto español. De punta a punta, fue hoy uno de los mejores días de mi vida.