domingo, 27 de julio de 2008

Binarismo

Cuando pienso en lo absurdo de la existencia,
me pregunto cómo salir por la tangente,
porque si lo absurdo encuentra su contrapartida,
¿Qué será no existir sino lo más significativo de este viaje?

Si salir de aquí, es por allá,
¿Dónde es por allá sino es lo que no es por aquí?

Qué será de nosotros siguiendo esta lógica...

Palabra a Palabra

Si saltamos charco a charco y
salpicamos gota a gota,
respiramos paso a paso...

¿Vivimos... muerte a muerte?

Please

Cual pétalo en verano se despide de su primavera que lo vio nacer, el sollozo que causaba insomnio a sus aposentos oscuros regresó, no son en este lugar, las mismas cosas que solían ser cuando todavía podían respirar el aroma exquisito.

Nosotros los que éramos antes, por alguna sabia razón hemos dejado de serlo, con el tiempo las cosas se han ido transformando y cobrando un matiz renovador. No hay nuevas que resurgan sino de las cenizas, como un ave Fénix en su culminación, desde la grieta del caparazón. Escabullirse por ese orificio todas las cosas que no conocerás, porque padeciendo la omnipotencia de saber, es imposible atrapar algo de esta verdad.

Hay un espejo rasgado, hay dos rasgos que no vas a asir, hay ojos que miran de más y dos oídos que no saben escuchar. Una mente robada, un patito en creatividad. Dos oraciones trilladas con dos ideas plagiadas. No me vengas con cuentitos de historias fantásticas, porque es esta sola y miserable realidad. Pesimista o negativo mi quehacer, al fin fructífero mi preguntar.

Volver a indagar aquellas respuestas para no abandonar la autenticidad, que muchos carecen, que otros adolescen, algunos imitan y al fin en este campo de capitales culturales ¿Qué elemento de la estructura comandará? Vamos vamos, mi fálico significante, ahí donde agujero recortas, acá donde no sabemos qué. Sino hay a quién a acudiar, no te estoy llamando, aquí donde no hay ecos y son vacíos, aquí es donde irremediablemente quiero estar, y volver a pasar, y pasar y volver... ¿Qué sabrás de lo incierto de estas marcas? ¿Qué sabrás de lo imposible?

Salirse hacia adentro, retornado por fuera, enroscando una temporalidad inmutable con dos cuerdas sin aguja y un barrillete sin cola. Esta brújula marchita no se ha dejado domeñar, porque sus cardinales aún cantan, silvando bajito... con falsa modestia. Me aburrí de aburrirme y todavía sigo dando vueltas, por traviesos pasillos neuronales, tan sólo por pasear.

Porque aquí es donde termina y también me cuestan los puntos finales, prólogo de un nuevo comienzo, epílogo de un viejo acabar. Para retornar y que vuelva a dolerme, para volver y volver a estrellarme, para seguir pasando por lugares cuasidesconocidos, para que recuerdes que hoy incluso puede ser demasiado tarde, para empezar a ser original o dejar de ser un rejunte de imágenes ideales profanadas. Es un elección y hacerse cargo del después.

viernes, 25 de julio de 2008

Rano

Los de antes añoraban que hoy, fuera de otra manera de lo que hoy es. Resultan en aquellos momentos de iluminación que la ilusión logra pintar de colores un futuro abyecto, y como el presente sólo es ni pasado ni futuro, sólo podemos tener certeza de lo que fue. Por eso hoy no fue lo que en aquel momento se proyectaba como que iba a ser, pero eso no importa. Sucede siempre y en las mejores familias. Acaso, como si algo se presentara importante, no es más que justamente aquel disfraz, todos los príncipes son ranos, pero ¿Serán todos los ranos un príncipe... para una? Famoso momento convocado a ser el del enamoramiento. Pero no de todos uno puede enamorarse y no todo enamorarmiento conlleva a una (des)unión.
Pero no puede más que realizarse en base a cierta promesa de.. claro, disfraz, confianza, llámese como se llame, aquel núcleo indestructible, aquella incerteza dilemática. Somos dos, que no queremos ser uno, insistimos en seguir siendo dos, no podemos ser uno y sin embargo necesitamos del Uno, al menos como cierto lugar de llegada, como carretera principal. ¿A dónde vamos si vamos a ningún lugar? Si vamos a B, si vamos a C, si no vamos. Y si vamos, pero sin ir, siendos dos que pretenden ser dos ¿Dónde está la razón que le de medida a esta conjunción? Aquí los príncipes ranos son puras patrañas, señuelos a víctimas en cautiverío, a soñadores impíos, a místicos sin Dios. Proezas valen en sus insignificancias valiosas, acompañando detalles... hilos tersos inconfundibles al perseguidor de joyas en bruto, aquel incipiente molusco que aún bello, se entrega en ese beso compartido... uno rano más allá o más acá en la superficie de lo impensado.
Ahora, siguiendo sin hallar una medida ¿Qué es acaso los que nos une sino una oscura cosa? Escuchame vos, te lo pregunté más de una vez ¿Por qué estás aquí? ¿Qué es aquello que nos rehusamos a saber? ¿Será asible? ¿Será inefable? Y no me mientas porque te diré la verdad... tan sólo, para mi... es desconocido y no me vengas con la retórica del amor. Ayudame a escribirlo.
Dime ¿Che vuoi? Aún sin saber si quisiera saber esa respuesta, vos tampoco me lo podés decir. Ok. ¿Qué puedo tomar como absurda garantía? Habrá un riesgo del que los dos seremos responsable si llega a ser: de haber emprendido este viaje en direcciones distintas.

martes, 22 de julio de 2008

lunes, 21 de julio de 2008

Notbody

Para abajo, para abajo, para abajo... y ¿Hasta dónde? Tocar fondo, ya. Quiero tocar fondo y desaparecer. ¿Am I here? Tocar donde estoy, sin saber como estoy. Si fuera fácil estar, si fuera fácil sentir, si fuera más fácil caer... hasta caer es díficil, desvanecerse, esfumarse de este encuadre insoportable. Mis lágrimas cayendo sin poder seguirlas, el odio dando una respuesta fútil ¿Por qué? ¿Por qué sigo acá? ¿Por qué sigo viva? No entiendo qué de esta pantomima puede ser una razón. Razón de qué.
Las palabras drenan un sabor que no tengo, envían mensajes de ficción que no veo, se clavan caprichosas por darle a este sufrimiento un desenlace ¿Feliz? Como si ahora no fuera un mañana, por el punto final que encarna, como si los interrogantes ya hubieran dado su respuesta, como si el juez hubiese emitido su veredicto. Si fuera culpable, solo cumpliaría una condena, el problema es que por ahí nunca es... Es absurdo, peor es sentir así y que no haya nadie a quién acudir.

viernes, 18 de julio de 2008

Circus

Los dolores regresan por las venas se hacen verdad, cuando no menos las mentiras las disfrazan para olvidar, en el zaguán de las lágrimas los ardores se hacen piel marcando a fuego lo irreparable. Tangencialmente, los recuerdos van abrazando la llaga y la herida se hace costra, la débil sutura empieza a dejar su cicatriz hasta que regresa con violencia aquel siniestro dolor, acontece vertiginosamente un devenir instántaneo de malvividos momentos, resurge de sus profundidades, con fuerte ebullición la sangre hirviendo cargada de angustia. Rasguña la herida, rompe con la cicatriz y la desprotección envenena el ser, otra vez el miedo, aquel temor con sabor a hiel, mientras siguen drenando velozmente el odio por el incipiente e histórico agujero que recuerda, que no sana... que no hay olvido, ni razón.
Nuevamente los avatares persecutorios de la insolente familiaridad que traiciona, cobarde, los seguros fantasmas que protegen de tanta atrocidad. "Venid a socorrerme ficción, venid a salvar mis penas esta noche sin refugios, cesad estos ruidos incesantes, apagad la turbulencia y encenced la turbina, hoy quiero volar... otra vez. Ya no sé de qué se tratan tus consuelos y sin embargo anhelo, la cálida pasión que calmaba, meciendo mi mirada, entornando mis oídos, adormeciento mi vida. No puedo volver, no hay camino de regreso ya no somos los de antes, tus puertas se cerraron tras de mi".
En la cueva profunda con escalofriantes susurros siento el desvanecimiento volver por mi, él vuelve. Yo siempre estoy. Si partir es quebrar y perder es doler, no hay qué me rescate de este circo macabro, ellos juegan con mi ser, de ellos depende mi... Y todo mi. Incluso, también aquello que off the record, nunca podría depender de mi. Sí, así es como lo absoluto hecho carne, te hace sentir. Así es como es, cuando ese Otro deviene Mantis, cuando es demasiado absoluto y nada depende de ti, cuando es demasiado absoluto que ni siquiera lo podés llamar para que venga a cuidarte...

lunes, 14 de julio de 2008

Desechos Humanos

Es subrepticio el cadente hormigueo, con olor a belladonna e idilios de libertad, se consume su contestura incosistente, tan transparente como la vida misma. No es ingenua su salida, no es sádico su proceder con incertidumbre debastadora, son las consecuencias persistentes de un suceder, han habido peores... siempre los habrán. También fueron más sabias otras decisiones acaecidas, pero no es inocente quien las anota, no son presuntos los aposteriori, que no decaigan a cualquier precio las letras que acunan este mensaje, que no malgasten sus dactilares los ilusos mercaderes.
No cuentan los arreglos, son viables los atajos, son agravios los del desprecio por la rectitud, son atavicos sus quehaceres y vestimentas. De lo más profundo surgen ahora arremetedores, luego de ser transformado por el temor, los deseos de venganza y desolación contra la raza impune, en racismo ultrayoico deshace la piedad y aparece sin represiones claramente el odio, el odio maldito que inyecta la sed de restitución.

Aquí se hace omnisciente la imposibilidad de la utopía, esas alevosías nunca son ciertas hasta que la degeneración toma su lugar, no hay escapatorias. Son viles. Te cruzan y vos no tuviste más que la culpa por no haber sabido elegir... este despotismo tan parecido a la sanguinaria guerra de los puestos, esta batalla a hurtadillas la vivimos todos los días. Solemos llamarlas arpías ¿Cuáles la diferencia con aquellos viles víctimas y victimarios?
No es rutina, pero es cotidiano en las afueras donde lo que no creemos exista, está. Sus aledañas costadas de barro, los techos de chapas, la extranjería que las caracteriza, ghettos de las urbe, comunas cuasi aisladas, con un cultura propia y sus atavios, sus lombrosos atavios. Los inviernos son cruentos pero mayor es el maltrato que retorna y sentimos en sus antentados contra la integridad. Aún así, de todos modos, ni loca me meto en sus costras a sanar la herida, hoy presa de mi ira, magullaría sus dolores -si los tienen- y su cinismo, sin llegar a ser una psicópata más.
Por suerte, ya no se ganan las confianza. Desgraciadamente, están hechos para morir. Nosotros también.

Memoria

Donde guardan los recuerdos
aquellos detalles sobresalientes,
de un mártir de ayer,
con aladas características de hoy.

Dame en aquel sabor,
una memoria sin lagunas,
pero que esta oscuridad
invasora, se desvaneza.

Las sensaciones vagas,
los sonidos primitivos,
unos ecos siniestros,
dame tranquilidad.

Este que es, no se sabe
conocido más que desconocer,
que sabiendo no encuentra
donde anclar una película
sin director,
sin productor,
sin guión,
catastrófica.

miércoles, 9 de julio de 2008

Un acto, cualesquiera, una pieza de la variedad, la más contingente. Tres pedazos, de una palabra cuartizada, una vertiente inevitable hacia lo más oscuro y enigmático. Porqué uno escribe y si uno escribe, escribe por escribir o tiene más que una razón sensata para escribir virtualmente, palabras y fonemas que nadie leerá o que leerán, pero en fin ¿Qué te retribuirán? No hace falta escribir, pero se sigue escribiendo. Los escritores profesionales corren el riesgo de que escribir se transforme en un "Hace falta" y ya no sea un "Hacer nada", digo hacer nada y no hace falta prácticamente se bideterminan. Igual, no viene al caso.
Tampoco hay caso, albedrío, jolgorio libre, liebres libres corriendo la liebre sobre la libertad del libertinaje gratuito. Pase libre al más bribón, vuelvo a encriptar sólo con el código de un saber que no existe, porque seguramente entalle un más allá, que ahora... no hay. O hay. ¿Quién sabe? Si la historia seguirá el mismo rumbo o si los pasos se bifurcarán, ya no es diacrónico mi inusitado recorrido, ahora lo asumo: es siempre rectangular. Y sólo por su Are, Rea, Era, y todas las combinaciones posibles que dan fuerza y esculpen anárquicamente o no, sólo que por suerte no lo sé, como para no detenerlo, al menos en caso de peligrosidad evidenciada, no importa.
La verdad es que no asumo mas que el juego sino el juego de jugar a que juego jugando, fabricando un brevaje insoportable, probablemente aburre. Pero así no me aburro, incluso me es probable que me divierta. ¿Lo ves? ¿Lo ves aparecer otra vez? Si tres piezas tengo, tres pedazos que posibilitan tantas oscuras cosas, cerrar los ojos, sentarme a hacer nada, sino hace falta más que hacer nada. Es lo que ahora estoy haciendo.
Antes cada vez sumergida en un discurso de hacer algo productivo, antes cada vez pensando en lo aburrido de aburrirse intentado desaburrirse, probando modos alternativos que aburridos... todo aburre, magnificamente infectando de inmovilidad, estas humildes tres piezas que harían poesía si las dejaran, haría más que oraciones y frases hermosas, harían nada. Son inofensivas, como todas las letras ¿Pero son inofensivas? Y de nuevo se embadurna del unguento amargo sabor a capitalismo agotador. Resulta indiferente si son o no son inofensivas, lo importante es en la mayoría de los casos me atrevería a decir, lo de ellos nos crea, en un ser... siendo un ser que no puede más que ser, no siendo. No se puede generalizar la experiencia, sólo puede decir que lo viví.
Allí estaba esperándome o yo a la espera de encontrarlo, cuando al fin "nos" dimos cita, en aquel encuentro todo se volvió imposible, inclusvo fue traumático. No hay palabras y no tenía nada para decirme ¿Qué le iba a decir yo? Aventuré unos balbuceos, mientras lloraba "Ah ya no puedo hacer nada" Zas! ahí lo atrapé, lógicamente, se me escapó pero su "pupu" dejó entre miradas que me hablaban, yo chupaba una lapicera y pensaba "qué será? qué será que me dejó esta frase y me dejó tirada?" o bueno, prefierí quedarme quieta, por si las moscas... llegaba a volver, seguramente lo haga. Como siempre, no será bienvenido, pero no hay nada que pueda hacer, ni siquiera culparme, lo probé no sirve. Hay algo que sí. Que cuando volvamos a no-vernos, ni escucharnos, etc etc yo esté haciendo nada. ¿De qué me podría culpar? "ocio! ocio!" Esa no serán sus palabras dignas, porque palabras no dice. Pero hay una voz que no se calla, por eso me callo yo, por si las dudas, me cayo.

domingo, 6 de julio de 2008

A mi no me vengas...

Para los que hacemos tanto que no paramos de hacer aunque no hagamos, haciendo. Maldita "h" que enmudece al capitán que comanda este hacedor movimiento, con sus sonidos-silencios, con sus mudas de ropas, a mi no me vengas...
Porque es imposible para nosotros los activistas contastes y apresurados, ir por la vida sin repudiar "Eh! No puedo no hacer nada. No puedo quedarme quieta" contraproducente consecuencia moviendo los pensamientos de acá, para allá, convirtiendo el tedio en un sinfín de hipotéticas teorías del "será que debe estar...". «Previsibilizando» como siempre cerrando.
Si nada no puedo no hacer, si su consistencia he de arrancarle, fu..fue..fuera! Off the record: piripiripipipii... iiiiiiiiiiiiiiii. Moverse, por incomidad no implica cambiar. Moverse, por "necesidad de hacer" (Castigo castigo castigo!!!) no implica implicarse. Por lo que, tampoco terminan importando las justificaciones. A mi no me vengas... con explicaciones.
Seré realista, como siempre déspota en esta controversial comedia dramática, de qué se trata innovar sino con lo que hay, y si tengo tres palabras, a saber, "no hacer nada" mejor drenar aquello que está de más en pos del placer y aprehender "hacer nada". A mi no me vengas con esa cosas de los límites, porque yo no te lo respeto.
Someterse a aquellas indomables batallas que se prestan al entretenimiento de la mente, castigan y esclavizan al cuerpo rebelllllllllllde -con muchas "eles" para que rebel y de se separen vía muralla letrada-. Un día había dicho yo que cuando uno se encontraba bien no tenía razones para escribir, no diré que descubro o lo diré literal, nunca es creación que no haya sido creada, pero si este mundo no es otro más que el que me creo y a la vez me crea ¿Quién va a crear en mi mundo sino yo, simultaneamente recreándome? ja! a mi no me vengas...
Entonces, en mi mundo, la creación es posible, gracias a que por suerte no puedo conocerlo todo. Aunque ingenuamente probablemente de modo inconciente, aspire a... en el mundo de los Otros, serán otros los próceres creadores de libertad, pero si me creo que creo, puedo creer en crear y crear y creer también en esto que creo y me crea por propiedad extensiva. Con aquellos que creemos en que las cosas que creemos que creamos, son más o menos, compatibles y nos damos el crédito de haber creado algo en lo que creemos. Bleh... simplemente es otro modo de hacer nada.
No hay consistencia más que contenedora de sentidos, sin más: insensatos. Yupiiii!!!

miércoles, 2 de julio de 2008

La Calesita

A la calesita nuevamente he llegado entre las sábanas y controvertidas vicisitudes, con la historia sin fechas, girando y girando. Circularmente volviendo al mismo lugar que ya no es singular, no es ni siquiera lugar, pues la calesita sigue dando vueltas sin marcas dejar. Porque las postas parecen ofrecer cierto triunfo al caminante, porque haciendo se concretan las fechas y los sitios históricos, que son sólo para quién deje allí una estigma. Lo convierta en tal.
No hay consistencia en las palabras que orales se volatilizan, qué cumplir sino nos olvidamos que hacemos aquí. Más que un compromiso, celebrar un espacio en el cual construir en equipo, de al menos dos. Aquellos andamios que se oxidan esperando que la calesita pare de girar, mientras comienzan a crugir las poleas del divertimento, se oscurece el paisaje, se olvidan las voces, los desiertos áridos comienzan a cubrir todo de arena y pesadumbre. La gota se hace pesada y no hay de dónde beber, cuando el precio por salir de aquí es tan bajo ¿Cómo revertirlo?
Si rebobinamos, vemos como llegamos acá... ¿En qué fallamos? Cambiamos de casette, y volvemos a grabar la misma historia en un escenario distinto. Rebobinamos. De adelante para atrás ¿Hemos aprendido algo? A veces no podemos ver lo obvio, no podemos escuchar las voces si los ruidos de la calesita no paran de taladrar la sien. Es momento de parar un segundo y sentir. Dejar de pensar y sentir. Hacer algo distinto, más que dar vueltas en la cabeza las palabras que ya pierden su sentido, por pensarlas y no ponerlas en marcha se agotan en la liquidez neurótica, en la cofradía de los pensamientos.
Sellar, marcar, tallar, hacer, construir, surcar, moldear. Para que la actividad no adquiera ese vicioso y vizcoso modo de ser, tan alienador como "calesiar", que no tome ese matiz oscuro y gris de la discusión estúpida alienadora, que la ocupación no sea no hacer nada. Que sea, para dejar de calesiar, innovar. Que no es fácil, pero tampoco imposible. Que el envión que empuja a la hamaca, nuestras piernas puedan sostenerlo, que no sea uno empujando el vagón, que las risas se conviertan en música y los canales áridos y estancos se cubran de alegría, cruzando y surcano. Que el agua tome consistencia en su fluvial movimiento. Que el espacio sea espacio móvil y recíproco, para todas las costas y las orillas, para que pueda mojarme los pies sin desilusionarme porque agua no hay, para que la frescura nos limpie la cara y nos haga sentir. Fluir.