sábado, 19 de diciembre de 2009

Caracol-a

Y hasta que empiezo,
si me dejan, estas palabras.
tardan en llegar al puerto
de mis ansias por navegar.
Costas que no conozco,
quisiera arribar y nunca
termino de llegar.

A tal punto se enfilan,
que no logro afilarlas
ágiles, ordenan
con sincretismo,
lo insulso que se puede decir.
Escatiman mi inspiración,
aspiran la ilusión.

Insultan,
y lo que callan, resguardan.

No vienen a contarme
aquello que no sé
y repiten la misma cantinela.
Repito, que repiten.
Tantas vueltas para salir...

Caracola, casa-caparazón
mareas entre vuelta y vuelta
nauseabundo, si mi pierdo
el tiempo de la salida,
porque ya entré y
me enredé.

Hierve, si me quedo
Duele si me voy.

Me quede donde me quede
tu caracola, me atrapa
y yo me dejo cazar
como presa del juego
del que tal vez, no quiera escapar.
Y cortar,
cuando no haya vacante
para tu canción.
Y correr,
cuando me sude la sien
y hierva el sudor.

Parar.
Cuando como ahora,
sea tiempo de esperar.

Esperar.
Por lo que tardas en venir.
Un día me invitaras a salir de aquí.

Viajar... sin caracola,
no sé que será de mi.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Saturación Precoz

Cómo explicarle a las tripas que se retuercen
que aunque se mezclen y deshagan eternamente
las espinas seguirán clavándose y cada vez, peor.

Y frenarlas, para que aspiren y sientan.
¿Qué otra forma de admirar los patético?

Mi hogar se oscurece, sin el aura de la osadía.
Fugarse, cuando no quedan alternativas,
encerrarse en la cárcel poderosa de la mente.

Salir y cambiar,
hacer oídos sordos al desaliento.

Aquel árbol torcido, no cambiará de lugar
y un bosque entero está a la espera
de dejemos de rendirle ritual.

En este salón,
si bailamos ¿De quién es lo que sobra?

Me pregunto... -cagamos-
cómo salir, estirarme sin que me persiga.
espero no perecer con tanto otoño alrededor.

Vos sos tierra,
yo necesito aire.
Dejame partir(te)
Say no more.

jueves, 10 de diciembre de 2009

Azardeter

Ahora que no me pregunto,
por no complicar, no pregunto.
Sospecho, que imposible
darle ventaja, a él
que siempre se me adelanta.

Detrás, dirige el zeppelin
de mis sueños y pesadillas
de mis noches astillas
premoniciones que
exhibe y hay que saber leer.

Me casó, dejándome en las sombras
de las viscocidad y el moho.
Postergo, entonces, lo que en serio
debería ser enfrentarte.
¿Cómo alumbrar la oscuridad?

Si tengo miedo de encontrarte...
Cuando te cruzo, esquivo
mi cuerpo y mis ojos
no miro, donde es silencio.
No puedo decir, que
no estás aquí golpeando parejo.

Tampoco negar,
y lo admito.

Sin embargo,
no puedo hallar
esa forma irregular
que adormezca mi furor
acobije mi temor...

Me alegro, que por esta senda
en la cual te cruzo,
me vengas a encontrar.

Me alejo, porque esta senda
está muy lejos de aquella
que mientras camino
desde aquí anhelo.

Deseo y tengo miedo
de que un día
se encuentren en nuestros pasos.

domingo, 15 de noviembre de 2009

Simplicando

Somos como espejismos, estamos
como sombras, caminamos
como pájaros, volamos.

Diría, para quebrar
el silencio, hablaría para
diluir el tezón que gobierna.

Y que si despliego papeles,
si enlazo fonemas,
si pego y pongo,
saco y copio.
¿qué digo, si digo?

Siempre yo, y cuando
menos yo, más yo.
Fuera de la medida
hay una obra distinta
que está sonando,
actuando, cuando
de vez en vez.

Simplico,
no puedo más, hoy
deformar.

jueves, 12 de noviembre de 2009

Sobre la más generalizada degradación de la vida amoroso en el macho

Ahí van por separado
codeándose sin anudarse,
como ríos paralelos
compiten por la corriente.

Que sí, que no.
Que viene y va.
Porque hay uno,
no puede estar el otro.

So, pretexto, el dique.
y fluye entonces,
a desmadre la pasión,
sin encuadre la pulsión.

Y ahí, donde andarían juntos
las Susanitas y los Don Juanes,
sólo encuentro fantasmas
azotados de masoquista reicidente.

Para responder, en ese lugar que
el amor no puede cubrir del
maldita carencia, puta falencia
la de mi psiquis imperfecta.

No quiero ser,
no quiero que seas,
no quiero no quiero no quiero
El goce del Otro, no es signo de amor.


Y yo sólo quiero desear...
donde haya amor.

lunes, 2 de noviembre de 2009

Ensayo de amor

A la espera y en el respeto
por la espera.
A la izquierda y a la derecha
dejándose bailar.

Te invito una copla,
me regalás dos metáforas.
Una forma de ser tan parcial
un andar circunstancial.

No sé cómo allí has llegado
si es que llegué, y no juntos
pero nos miramos al costado
ahí estás caminando.

No importa más que en la cama
si más adelante o más atrás.
Aquí vamos, riéndonos a la par
el dos, un lugar donde armar.

Me tomás la mano,
me llevás a andar.
Frenás, te invito a cantar.
Y bailamos, aun a distinto compás.

Pero si es correcto
simplemente aquí vamos.
Giro hacia allá.
Miro y hablo. Te amo.

Allí te vas, aquí me voy
así me amás, así estoy yo sin ti.
Volviéndote a encontrar,
en esta forma de amar.

martes, 20 de octubre de 2009

Deseo de Deseo

Acaso yo esperaba, por si un ocaso
terminaba con el caso trillado.
Pero, no hacía más que esperar
que llegue o el caso trillado o el ocaso.

Un día, los casos cambiaron por cosas.
Ya no esperaba el ocaso, por si las dudas
la cosa se anticipaba a mi precipitación
y audaz, debía elegir entre el caso o la cosa.

Sin duda, la espera asintótica o deviene locura
o se licúa en la textura de la cobardía.
Y cuando no se puede elegir, no se puede.
Entonces esperas que te encuentre la decisión.

No se puede dejar de esperar, pareciera...
Yo no esperaba llegar a este mundo
y mucho menos ser yo. Nadie lo esperaba.
Cuando te encuentra, el fin de la espera

Termina el fin o inicia un desconcierto.
Por llegar hasta aquí...
¿Qué pena le valió a la tinta?

viernes, 16 de octubre de 2009

Vernos reír

A carcajadas, caíamos al piso.
Como dos vasos rotos
desparrabamos la risa,
por la mesa, por las baldozas.

Con los ojos llorando,
te enroscabas en vos mismo.
Con los ojos cerrados
podía vernos reír.

Nos sentía reír
hasta en los huesos,
vibrar, cantar, chillar.
Hasta los pies reían.

Las horas nos arrebataron
más que el tiempo,
y no podíamos dejar de.
Así se nos fue la vida,

Y no hicimos más que
vernos reír.

miércoles, 14 de octubre de 2009

Con Ale escribimos...

Donde existir, no todo es vivir.
que fagocita la muerte en su linealidad.

Marca.
Golpe a golpe.
Rítmicamente.

Pero vivir en y por el deseo de vivir.
implica la circularidad de la acción misma
que encuentra su razón, en la acción de vivir.

Retarse a duelo, entonces.
Con esta magia de masoquista,
al que le gustan morder anzuelos.

Entre rótulos y sensaciones,
en la marea del ser.

En el constante vaiven de existir,
de ganar y perder.

Vivir es transitar.

sábado, 10 de octubre de 2009

Genus

En el origen,
sobre las mesas, las cartas
dentro del sobre, las letras
debajo, muy debajo de la tinta
un rasgo originando,
y detrás este impulso bribón.

Entre las cejas, los ojos
de los ojos, la mirada.
De la mirada, la contemplación.
No puedo evitar sentir,
sintiendo mientras soy
en el silencio de la mirada.

Este puente, sobre la mar
seguidilla de puntos en suspenso
Despliega, la risa descosquillada
sobre la cama, en las sábanas
enredados los dedos,
sudando los cuerpos. Llevame,
a través, por sobre, debajo.

Huellas, es lo que hay en el origen
del final, las letras que tallaron
que horadaron, la superficie
del aire, y soplan con el viento

en el eco,
en la flor,
la cintura,
la canción...

...las notas destiladas del amor.

miércoles, 7 de octubre de 2009

¿Como me alegro?

Una pregunta, que hoy encuentra su correlato. Una pregunta ignorante de antaño, preguntaba: "¿Cómo me Alejo?". Ella, no encuentraba parangón. Y admitió siempre, una repetición que ensayaba una respuesta posible nunca suficiente.
Hace tres años que ella convive y comanda este barco, al modo simbólico de estar mar real, que alberga un -y me pongo psicoanalítica-sentimiento de culpa inconciente (RTN) Que reviste, la viscosidad de la libido... en este barco tan «borde» impenetrable.
Estuvieron, dejando decir y mostrándose, esas palabras del crucigrama que siendo tan obvias no alcanzaban para hacer del desamparo una salida responsable. Una respuesta a la pregunta literalmente colgada "¿Cómo me Alejo?" Es larga la historia. Muchos la conocen, tres años y se acerca el día de la madre. Tres años y el 22 de octubre era su cumpleaños.
Hoy volví hablar de ella. Con mucho dolor... con culpa, con reproches y también con amor. Porque la amé mucho, como todos a LA que les tocó en suerte (tyché?). Me desgarré entera, todos sus ropajes quedaron sobre la mesa, todos se diluían en el llanto y la angustia en el pecho... ¿Qué iba a hacer yo con tanta libertad? Excribir. Desde ya.
Antes hablé de la amistad, supongo que hoy hablo de la "hijandad" porque de mi viejo, también hablé mucho, y cuánto. Pero todavía está aquí por suerte.
Desde bastante adolescente tuve una empatía patética con las teorías existencialistas, y si bien hace tiempo que sé racionalmente, sé y vivo en consecuencia que, de cualquier forma estamos solos, aún acompañados, también estamos solos (no solitarios)... es insostenible que la palabra en su dimensión toda, no sostenga la existencia. Es una antiNomia. Pues sí.
Aquello que sostiene es lo mismo que te condena a "la vida sin la bolsa". A la vida cercenada.
Pues, a donde quiero llegar si es que quiero llegar a algún punto. Es que tanto y nada, la obvio del sobre cerrado sobre la mesa y la complicidad, en la eterna necesidad de olvidar. Me olvido, si. muchas veces de muchas cosas, lo repetí varias veces. Pero estaba invertida la ecuación, igual que con la confianza, igual que con lo inaplicable de la racionalidad. Pero acepté su contradicción. Uno si de alguna manera puede ser, es siendo una contradicción. Y digo, siendo. Repito, gerundio.
Así como ya no me olvido que el viernes tengo que ir a sacarme la muela de juicio, me olvido de lo que me importa del juicio y apelo, más allá de la sentencia. Es que ya no dependo y no me marca o desmarca, la inexistencia o inconsistencia del Otro. Al menos hoy, y hablo quién lo diría, a calzón quitado. Y hablo si me leen o no me leen. Es la única manera de aprender a callar cuando es necesario.
Pero técnicamente, esconde un reproche. Que ya lo dije. Y el reproche anuda la culpa (que borde finito). Que ya lo dije. Así que ahora, si algo le puedo robar a ésta es la responsabilidad. Si, de lo que digo y no digo, hice o deje de hacer y ya no la culpa... de lo que el Otro hace "como si" y aquí nada ha pasado, por lo que no hay nada que decir. Hay mucho que decir, aunque el otro no pueda o no quiera. Y ambas partes lo saben, lo sienten y por eso la tensión. A más de uno le habrá pasado que el miedo te asfixia tanto la garganta que cuando ibas a hablar... afonizaste.
Es un alivio, y cuánto. Sobre todo, por los momentos que se avecinan... y tomorrow, tomorrow never knows.
Por un tiempo seguramente, no hablaré de mi tan explicítamente y nunca es tan claro tampoco. Entrelineas como siempre, es la forma más bella y magra de brindar mi ser y mi alma, es la forma más sutil de convocar a la alegría.

lunes, 28 de septiembre de 2009

Olvidos Cotidianos II

Entonces, les cuento la vez que me olvidé del cumpleaños de mi hermana.
Hacía mucho frío, pero menos que para mi cumple, me había dignado de una buena vez a hacer esas cosas nunca queremos hacer, pero claro... pifié: era viernes. La city, un caos. La gente, destruida connotando en su rostro una mezcla de alegría y cansacio. Al fin la ansiada víspera de fin de semana. Después de los póstumos trámites, me fui a lo de mi amiga Liz, era la época que la ayudaba con su microemprendimiento de collares, al irme salí apuradísima ¿Y qué me pudo haber pasado? Me olvidé el celular! Ja! Y encima me olvidé que me olvidé, porque recién me percaté cuando estaba a siete cuadras arriba del odiado y tan querido, 92. "bueno, fue, la semana que viene lo vengo a buscar". Otra semana sin celu, no es tan extraño en mi, sin contar cuando me quedo sin crédito. Bueno, llegué a las mil quinientas a casa y cuando entro: ¡Sorpresa! Por Dios... ¡¡¡¡¡¡el caaaaaaaagazo q me pegué!!!!! ¡¡¿¿¿Que paso???!! ¿Qué hacía toda esa gente desquiciada en mi casa? Y me cayó, si me cayó la ficha... era el cumpleaños sorpresa a mi hermana Maria de los. Todos re puteandome y sí, tenían muchas razones para hacerlo. Menos mal que mi hermana nos dio tiempo a que nos preparamos todos para su ansiada bienvenida, llegó una hora después.

No sé porqué todas las anécdotas que se me ocurren atañen al celular. Así que la que pensaba contar la postergo y les cuento otra.
Resulta que salía con este chico que creía yo que me amaba mucho y después se fue con la primera que se le cruzó, pongamosle Julián. Aquella era una época que tenía muchas actividades y la mayoría las hacía sin ganas, cual adolescente en boga, gustaba de dormir largas siestas. Ese día, Martes ¿Les gusta? Suena el teléfono que por acto reflejo atiendo... muy dormida desde ya: "Belen! Belen! estás durmiendo te voy a matar!!! hace una hora q te estoy esperando!!!!" uhh cagamo dijo ramos. Rememosla: "juli amor! si... perdoname me quedé dormida pero en 10' estoy ahí!! te lo prometo". Aceptó, no muy gustoso, pero aceptó. Debo confesar que no sólo me había olvidado de la cita, sino que además me había quedado dormida, impidiendo cualquier margen a mi fucking inconciente de resarcir su error, tarde, pero justo a tiempo. Suena el teléfono de nuevo...
"Belen! te estoy esperando ya pasaron 20 minutos!" Belen, dormida, atendió el teléfono. "no nena!! otra vez te quedaste dormida!!!!! esta no te la perdonoooo!! me voy ya para mi casa". "no no, Juli, amor!! no estaba dormidaaa! como iba a estar durmiendo?? Me retrasé porque tuve que ir al baño..." No creo que me haya creído, aunque me creía cada cosa. Les resumo el final: para esa instancia, ya lo tenía en la puerta de casa re caliente! y no de la forma que más nos hubiera gustado... Juli, si, me fumó. Yo también fumaba. Ambos fumabamos, pero me sacó buena... por suerte para el que siguió.

jueves, 24 de septiembre de 2009

Olvidos Cotidianos I

¿Y qué hacés cuándo te olvidás las llaves de tu casa?
Si tengo el celular, llamo a casa y pregunto si hay alguien. Pero la vez que me pasó, no había nadie. No fue esa la primera vez que llamé y nadie acudió.

Peor una vez que perdí el celular. En realidad, fue una vez más, producto de mi olvido. Fuimos al gimnasio como acostumbramos con mi amiga Mariel, hicimos la clase, volví a casa, cené, me bañe y cuando a las 12 de la noche fui a buscar el celular no lo encontré. No me digan que no es una sensación ambigua esa que te arrebata cuando "no lo podés creer", cuando tratás de entender qué pasó y es una pantalla negra o blanca y no podés ubicar ese momento clave. La cuestión es que llamé. Apagado. Y bueno, no voy a llorar sobre los restos de lo descartable. Es más, asumí que era algo bueno estar sin celular, no sólo por el hecho de evitar su efecto cancerígeno, sino porque me sentía más libre. Verán, mi viejo no pensaba lo mismo. ¿Y ahora cómo me iba a ubicar? En vano era explicarle que si alguien quiere encontrarte, no necesita del celular, y pero es así, el aparatito ese de porquería, le hace tener al prójimo la ilusión de que sí. Por otr lado, es cierto que le molestaba más a los demás mi extravío que a mi.

Otra vez me olvidé la bufanda, la carpeta, los anteojos, la plata, los documentos, la entrada, la cita, el mate con amigas, la yerba, el horario que tenia que viajar, la de las llavé ya la nombré y muchas más.

Sin embargo, hay olvidos que duelen y disparan vaya a saber uno el odio o el amor de dónde. Cuando era más pendeja que ahora, salía con un chico. Un día, cristalización de un proceso, dije esto no puede seguir más así porque es más sufrimiento que placer, por lo que salida fácil: elegí por los dos. Yo creía que el estaba profundamente enamorado de mi y por tal, tenía que religiosamente llorar por mi todas las noche, estar en duelo por meses y hete aquí que no fue así. Rápidamente, se olvidó de mi. ¿Cómo podía ser? No lo podía concebir, agujero negro otra vez señores! Así que procuré despertar en él un profundo y grandísimo odio más que el amor que me había podido tener -dado que no había alcanzado- y una vez que nos encontramos en un boliche cualquiera, se podrán ustedes imaginar la idiotez que cometí.

Otros, en vez de que decidiera yo por ellos olvido o recuerdo, presencia o ausencia, han decidido por mi. En un circuito de intercambios diplomáticos y con ayuda del paso del tiempo más allá de las ofensas mutuas, acabaron por no consentir mi idiosincracia histérica en la formalización de un amigable trato muy parecido a la amistad. Lograron de ese modo, librarse así de mi insistente revindicación aunque un poquito tuvieron que padecerla. Un caso de esos, fue una vez que me olvidé la promesa que había hecho y me fui al carajo. Después que estaba todo bastante "tenso", me acordé. Claro, tarde. Siempre tarde Pez. Porque mi inconciente me avisa, de una forma extraña pero me alerta, así que no traiciona, después me devuelve la pieza que me faltaba para resolver la encrucijada, que ya es una película de suspenso, terror y amor (?). Tampoco colabora que la otra persona un austrolopithecus y no contemple que a veces también nos olvidamos que... En fin, eso desencadenó una "irrisoria" -para mi aun no entendia el porqué- reacción de agresividad en él, desconcierto en mi (Belle Indifference), con la consecuente entonces, suscitación de armado de la película. Yo de chiquita veía muchas novelas y pelis de Disney.
También me tocó padecerlo, así que tal vez es por eso que lo hago padecer... sin querer.
Una vez mi vieja se olvidó de mi. Yo salí del cole y mi vieja no estaba. Volví a casa y toque mucho el timbre, nadie acudió. De tanto timbre se ve que lo escucharon los fervecientes vecinos, porque eran nuevitos nuevitos. Me invitaron a pasar, yo siendo políticamente correcta y cuidando mi inocente niñez me negué de forma no muy convincente varias veces, pero finalmente entré. Me prepararon la merienda y me enseñaron a jugar al Pac Man en la PC (era la primera vez que veia una) Me sentía... oh! como nunca! Your majestic the baby! Y la vi pasar... a mi vieja desesperada por la ventana, me quedé mirando y pensando "¿Qué hago? Esta loca me va a matar". Tenía razones, mi vieja era genéticamente y culturalmente tana, y no sólo eso. Ya había pasado que ella se había olvidado de mi, yo había hecho la mía y al reencuentro: paliza. Hoy por hoy, me puedo reír y cómo! jeje
La cuestión es que le dije a mi vecino "la vi pasar a mi mamá". Ellos le habían dejado un cartel que obviamente mi vieja no había visto, la cual hubiera resuelto el enigma y me hubiera a priori, "salvado". Finalmente, mi vecino que ya estaba alertado de mi temor mamistico, se me anticipó e insistió para que mi exagerada madre no se la agarrara conmigo. Lo logró, afortunadamente para todos. No hubiera sido un buen comienzo de vecindad.
Otro día, sino me olvido, contaré matizado con invento, otros olvidos cotidianos. Algunos muy graciosos rozando lo patético. Pero así soy yo, una histérica olvidadiza.

martes, 22 de septiembre de 2009

Anhelo

Que la sangre que parte,
se vuelva manantial
y calme mi sed.

Que la soledad que sobrevuela,
no vigile más, este miedo
loco de volverla a encontrar.

Que el silencio, no apague mas
la llama del amor y el latir
de este corazón pueril.

Que los pasos sigan hacia allá
sin mirar atrás, sin medir
ni contar los kilometros.

Que los rompecabezas,
recuperen sus piezas
del olvido acéfalo.

Que los sueños pesadillas
devengan cosquillas sobre
tanta realidad carnivora.

Que el agua limpie este dolor,
y el dolor se hunda en el colchón,
al tiempo que resucito otra vez.

Y que las palabras por fín,
vuelvan a cantar su prosa bendita,
su misterio sagrado...

Anhelo, si.
A veces anhelo.
Lloro, si.
A veces lloro.

Grito, sí.
A veces grito.
Y muchas veces más
vivo, aunque parezca un engaño.

Anhelo, sí.

viernes, 18 de septiembre de 2009

Excribir

Si hoy escribo, es porque no basta el sustantivo para desarmarme en un ritmo fijo. Si la tensión que engendra esta necesidad, se haya en algún lugar es desde allí donde perpetua esta correntada gramatical.
Cuando escribo, más acá de lo que podría decir me excede la exageración y deviene ficción el paraído terrenal que me abraza. Y le doy una vuelta y otra, tipeo, cuelgo, bebo, pienso... fumaba. Nunca fue fácil, nunca lo es... mucho menos ahora, que hablo en singular.
Otra veces, cuando vuelvo a flotar y la brisa imaginaria mece mis palabras escribo lo estéticamente bello, ora lo feo zigzagueando los extremos, chocando con los muros o quién dice sino, midiendo la distancia y el calibre de aquel sentido que encarna las palabras. Eso es el miedo.
Y escribo, girando al descubierto... calesita sinfónica, caballito de mar, burbujeo a veces. Cuando se me da la gana, en soledad e insomne le dedico a esta noche una metáfora exquisita.
Escribiendo, es cuando resucito y vivo. Decanta pues, el título de este solitario blog. No creo que nacido con otra intención. Hubiera preferido, si... creo que si, se que se leyera sin que por eso fuese popular. El dolor, la angustia y la subversión no hacen insignia.
Por otro lado, puedo soltar las riendas de mi inquisición y dibujar con un trazo sutil y destellante un segundo, dos milimetros, un gramo de felicidad y excomulgar la sensibilidad que llevo dentro y encierro en las fauces de un callejón hostil y gruñon, doloroso e impío. Porque suelo y hoy lo puedo decir, invertir la ecuación, por lo que en vez de venderme, doy todas aquellas razones por las cuales no debería invitarme a su hogar... en vez de confiar en la tersidad de una mirada, me encierro en las llamas del infierno. Y pululo, entre el borde de la inmensidad y el borde de la miserabilidad. Y me culpo, maldigo y sacrifico en la exageración del grito... y exageración, porque es sordo el oyente, porque es ciego... y se olvida que la indiferencia, es lo más crudo de la existencia.
Vuelvo. Tan finito es el borde que patético y bello puede ser este porvenir inusual. Si el mar me arrastra, las olas me devuelven ¿Será una utopía creer en una estabilidad? Es porque reflexiono que me pierdo, es porque me atrapa la red laberínstica de pensamientos absurdos que no puedo salir del mar de problemas que intento resolver.... y una ola es que me trae de nuevo hasta aquí. Y dejo de ensayar y empiezo a escribir....
De hecho, una vez escribí. Cada tanto, tengo la costumbre y a veces la inspiración de tallar la piedra y manchar el papel, horadar un hueco virtual en el cual despositarme, entera y cercenada mi alma toda y solitaria.
Entonces, vuelvo a escribir. A veces, incoherentemente y complicando la metáfora, es que a veces me pasa que no sé qué hago aquí y qué pretende decir, este más allá de mi. Qué quiere gritar en ese alarido sordo, cuando le duele la garganta de tanto intentar decir lo imposible del peso que gravita.
Y en este final, todo vuelve a empezar.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Exajenada

De hecho, una vez escribí. Cada tanto, tengo la costumbre y a veces la inspiración de tallar la piedra y manchar el papel, oradar un hueco virtual en el cual despositarme, entera y cercenada mi alma toda y solitaria.
Entonces, vuelvo a escribir. A veces, incoherentemente y complicando la metáfora, es que a veces me pasa que no sé qué hago aquí y qué pretende decir, este más allá de mi. Qué quiere gritar en ese alarido sordo, cuando le duele la garganta de tanto intentar decir lo imposible del peso que gravita.
Es grave, el ritmo y la melodía, aún cuando exagero.... es que me estoy refiriendo al tiempo y su palpitar, a la gravedad y su inercia. El espacio no alcanza, si no hay un abrazo en el cual regocijarte. Y es que si lo hay, otra vez lo hago con poesía y aun asi, ser tan siniestro y tenebroso.
Y por eso se entiende la crónica que de ese viaje parte, y ahora es ineludible la certeza, que muchas veces, uno tiene la tendencia de relativizarla en la duda, y ahora es cierto. Pero hay un acto que cava, un surco, dos curvas, un sitio habitable... incluso en la exageración ajena.
Sobrevivo en mi ausencia donde no es necesario regular la distancia, donde la cosa no se juega, no apuesto ni gano, ni expulso, ni es bello, ni feo mucho menos pesado.
Ayer un niño jugaba conmigo, mi mirada y mi sonrisa, desapareciendo de mi vista. Lo patético de ello, que la risa recubría, es la necesidad de sostener allí una presencia matizada con ausencia cuando es "en serio" que el niño cae y muestra que sus ojos no ríen y no dicen nada. Por eso yo, yo no podría ser psicoanalista de niños.
Y sin embargo, seré tan responsable que no cierro los ojos ni me callo, tampoco suelto la soga y ni le retiro mi palabra. Y ello no es para mi un sacrificio... sólo apuesto a la palabra. También deseo, más allá de mi, deseo y eso a pesar de que no tenga ni la más mínima idea de qué se trata, aunque el niño replique y yo abdique.
Tengo mis ideales, y no puedo dejar de remitir a ellos, que si la angustia le roba a la pulsión su certeza, encausando el deseo... no puedo objetar este lugar. En definitiva, hasta cierto punto, aquí es donde ¿siento? que "quiero" estar. Y lo mejor de estos casos, es que no espero nada.
Here comes the sun... me entusiasma pensar que el sol ilumine el silencio, que abra una puerta posible por donde pasar, y por el portal del espejo se refleje renaciente.
No sé qué me hace pensar (y trocar, al fin!, trocar el sinfe) que esta vez no va a ser igual, y que este "inmundo" va a cambiar. Del fondo, de la superficie terrenal, algo ya cambió.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Hoy quisiera decir...

Hoy quisiera decir
para bien o mal,
para quien quiera escuchar.

Lo que en privado, me privo
ora mermando las ganas
ora aumentando el deseo.

Quisiera decir...
que no me da lo mismo
contigo o sin ti.

Que tu presencia me sienta,
y tu ausencia me inquieta,
y no es lo mismo, contigo o sin ti.

Que cuando esa mirada te atrapa,
que cuando esa voz, te endulza...
¿Qué podría ser igual?

Insisto, no me da lo mismo.
que aunque no sé qué quiero,
sin embargo, quiero.

Y aquí estoy, para su capricho
para su juego, para su voz.
Para sus besos, para su piel.

Y él sabe, que también me voy
y me olvido. Llego tarde y me irrito.
Hago y deshago, viajo y sigo.

Vos sabés que no me da lo mismo,
ya lo he dicho algunas veces
lo he hecho otras tantas.

He confesado, y lo vuelvo hacer
lo volvería hacer y lo hago.
Que lo que soy no lo sé,
¿quién pudiera ser para ud?
si no soy para mi, mas no-ser que ser.

Quizás no le importa,
quizás me equivoque,
quizás no funcione
quizás no hay nada
que él quiera decir.

Pero como tantas cosas y más,
Aun no me da lo mismo,
Eso es una confesión
y usted,
usted, lo sabe.

Hoy quisiera decir...

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Dualismo

El problema no es si cielo o infierno,
el problema es el dualismo irrisorio.

Esta forma de pensar,
esta estructura de pensamiento.

El prisma que insiste en su reflejo,
la interpretación que significa
automática y no admite,
no admite falta.

Y aquí, otra vez.
Entre el horno y el freezer.

Y aquí, otra vez...
escapándole al sustantivo,
para inscribir un verbo.
Soltarse, otro poco de este lugar
y en el intersticio crear
un mundo terrenal posible.


Cielo

En las nubes adormecerse,
en lo fecundo de un decir, alojarse.
La estela de brillantina,
los soles de cada día.
La excusa perfecta.

Lo romántico del mundo
desde aquí para allí.
Lo sentido y placentero
de este vivir verdadero.

Donde es posible que...
sea posible, lo imaginado.
lugar ideal, aterciopelado.
Sentir, vivir, soñar.

La compañia al costado,
volar impensable
del deseo la voz.

Va y viene,
viene y va.
vamos y venimos
venimos y vamos.

Lo perfecto
del círculo y el encuentro
la verdad, presente.
Sobre todo,
la presencia y la ausencia.
Lo omnipresente,
lo sublime, lo ideal
lo amable...

La tranquilidad del viento
rompiendo en la nube,
su agresividad amorosa,
su caricia perfumada.

¡Disfrutalo!
Es la ley de amaneceres
frescos y divertidos.
es la estrofa de una canción,
la metáfora de una poesía
las mil noches recuperadas.

Es renacimiento,
es la cima de la montaña.
Es la alegría de vivir,
en el cielo habitar
junto a vos.

Infierno

Aquí, en lo inmundo.
en lo subrepticio de esta caída.

Donde hierve la sangre,
donde el dolor es más doloroso.

Debajo y sobre el pesimismo
en lo insoslayable de la náusea.

Lo apasionado de este calor,
de este estupor corporal.

Lo amargo de este sabor,
lo trágico de esta exageración.

Y pasar, no pasar.
Del otro, a contramano.

El goce de lo prohibido,
lo terrible de lo imposible.

Lo que hay ver,
lo que hay que escuchar.
Lo que no hay que decir
Lo que hay q mostrar.

¡Goza!

Y anda, inertemente
camina el cuerpo.
Recorre, cada circuito
en el filo del abismo
siempre a punto de...

Sobre la íes,
en lo alto y en lo bajo,
a punto de estallar.
De expulsar,
y caer
e ir a buscar
y no entender....
lo complicado de este
no entender, lo inentendible.

Lo insufrible de la existencia,
en la inconmovible roca
de la incomodidad de morir así.

martes, 8 de septiembre de 2009

Senti...dos.

Y aunque sienta la eterna necesidad de nombrar,
Y sobre lo que sienta, también el verbo a lugar.
Mas todavía, si emano sentidos
hasta por los poros de la piel, se filtra...
la corretiente de sensaciones que le roban
al cerebral acontecer, su mortificación.
Le otorgan, sin embargo...
la afluencia, la influencia, la fosforencia
de la tranquilidad paradojal,
de la quietud abismal,
de las olas arrebatadas,

E irrumpe.
Con su furia y alevosía,
con su violencia insensata,
tocando, los rincones todos
E irrumpe, el escándalo.
y la exageración de este temor,
de este miedo que señala,
y ante el cual no claudica,
el deseo somnoliento.

Se aquieta en este temblor,
la sensación que placer provee...
que risas sin estación, estallan.
y lo espontaneo de este decir,
y lo metafórico de este Vivir...
cobra sentido, sin que la necesidad
de ponerlo, lo asfixie en un suspiro.

sábado, 29 de agosto de 2009

Rayuela - Capítulo 7

Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

jueves, 27 de agosto de 2009

¿Invento - Realidad?

Sacudió su cabeza, como un plumero lleno de polvo. Sus canas apenas cuarentonas se envilecían en la maraña de rulos y diversos negros cabellos. Una vez me dijo que se iba a teñir cuando tuviera muchas, yo le creí. Hoy no sé.
Una de las veces que hablamos largo y tendido, también estaba Germán, su hijo. Admiraba como un niño obnubilado con la televisión su discurso pausado y en ocasiones cavilante. Deseaba algún día llegar a ser como él, y sólo por el hecho de llegar a ser en algún punto como él. Yo tenía 12 doce años cuando le pregunté por primera vez un consejo sobre una mujer. A mi viejo, no me atrevía a preguntarle y mis amigos eran demasiado estúpidos, se reirían de mi se enteraban que estaba perdidamente enamorado de Antonella. Ella fue la primera vez... y en cada primera vez, todavía recuerdo su olor a hogar. No puedo describirlo, pero me encantaba. Y no tenía otra fuente a la cual acudir que no fuera a Teodoro, mi vecino. Era rudo y parco por fuera, pero increíble por dentro, un tipo cualquiera, un tipo especial. Entonces, me animé:
-Teodoro, quisiera pedirle un consejo.
-¿Un consejo? No existen los consejos.
- ¿Entonces?
- Cualquier otra cosa, menos que te diga qué hacer.
- ¿Una opinión?
- Tal vez.... y no pienses que soy rebuscado, te estoy enseñando a pensar.
- Gracias.
- Ahora dime. ¿Cómo se llama?
Sorprendido, le pregunté:
-¿Cómo sabe?
- ¿Qué otra cosa querrías preguntarme a las 12 años?
- Es cierto...
Hablamos largo rato sobre Antonella y mi relación con ella, bueno... mi NO relación con ella más que por miradas y risas tímidas, inoportunas. Le conté de sus gustos, su vestir, andar, su belleza, sus pasatiempos, sus amigas. Él me escuchó atento mientras se fumaba un cigarrillo, y otro y otro. Cuando la verteginosa catarata de adjetivos de beatitud infinita culimaron en un suspiro, él habló y me dijo:
- Suele suceder con el primer amor, a cada loco le toca a su manera. Mirá pibe, es una bendición que te gusten las chicas, yo a tu edad era un estúpido como tus amigos. No sabía si me gustaban ellos o mi mamá. Tu actitud, me gusta pibe. Ahora, te diría que vayas al frente... sin embargo, creo que harías bien en conocerla. Vos me dirás... "pero si ya sé todo sobre ella". Y yo te pregunto ¿La conocés o esto que me cuentas es la imagen de las que te has enamorado?
El viejo Teo, finalmente había logrado que me pusiera a pensar... y hoy te puedo decir, que en cuestiones del amor el vulgo dice "hace lo que sientas", pero para mi, es necesario contextualizar. ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Qué...? Y los rodeos, la espera, la seducción... ¿Qué sería del amor sin el umbral de las caricias simbólicas, de los dones circulares, de las miradas furtivas, de los velos transparentes? En definitiva, mi pregunta es ¿Qué otro modo para que la realidad te atrape sin asesinarte en el intento? Quizás sea una mala pregunta, para una respuesta demasiado básica. El quid, está en la premisa. ¿Y qué si la realidad en realidad no es tan terrible? Por ahorrarnos el sufrimiento, perdemos el placer.... por gozar demasiado, pecamos de cobardes. Y la duda quizás, sea una duda metódica nomás.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Vacío

Y si hoy tuviera qué decir, algo qué decir... no puedo más q significar el cuelgue que me sostiene la cabeza entre idas y venidas mentales. Miro por la ventana y cuento las tejas, las rejas... las casas, los hogares de otros. Y pienso... ¿Qué pienso? por suerte no tengo nada que decir.

Estoy absorta, y qué te voy a contar! Hay que vivirlo y ya va a pasar. La nana, la pérdida de aquel adjetivo calificativo que te hacía pertenecer a... Y no estoy triste, no estoy dolida... estoy tramitando este "no sé qué".

Así estoy yo, entonces. Y no se hablé más. Silencio, es lo que necesito y esta sensación de absolotismo en el cual nos recocijamos mi alma y yo, mi nostalgia y yo. Es q ya lo viví, y vuelvo a revivir todo aquello que perdí...

Y ahora, aquel desván de juguetes perdidos se abre y en su amplitud ofrece nuevamente el polvo, y el olor a humedad.... y el diezmo a mis reyes, les pago para q caiga sin caer yo en el subrepticio underground de los dolores incesantes. De las heridas partidas.

y de las partidas, que tocan y cuentan. Que gatean impúberes, que tiemblan y desconocidas se entrometen en las sábanas de un sueño fantasmal. Y es Cuándo y ya.

Es tiempo de esperar... sin jugar, porque si bien quiero, ahora no puedo volar, ni exiliarme al más allá. No es más que nada, no más que eso, no es mi estilo impulsar a la salida... la entrada sin este entretiempo inesperado. Quiero palabras. Más, que me hace falta...

Y falta, tanto y casi nada. Falta y es una herida yugular, una injuria mortal.
Falta, y no hay nada... qué decir.
Ni qué hacer.

jueves, 13 de agosto de 2009

Será, será.

Una noche como cualquiera que hubiera podido tener lugar
una conversación que estas letras podrían relatar.

Una partida, y otro regreso, tan inoportunos.
También, es esta ebullición de las sonrisas eclipsadas.

Los momentos irregulares y el tiempo en otra dimensión
el espacio en kilometrajes, dos miradas en el plano.

Pensamos en la locura, pensamos en lo insensato.
Creemos que la locura es pensable, ingenuamente creemos.

Finalmente, vuelve al inicio este círculo
que retórico, nos envuelve en su arquitectura.

De ataño soñaba yo con que algún día nos cruzaramos,
de corazón, en este presente intersticio, espero yo uno bueno.

Proporcionalmente a este desfasaje, casi pero no igual,
aquí espero que termine este periodo silencioso.

Y después, será será. A partir de hoy.
No hay mas opción que será lo que será.
Hay tiempo.

lunes, 3 de agosto de 2009

Transferencia.

Va cayendo, cayendo...
en caída libre,
Va remando, remando...
ennegreciendo.

Se viene la noche,
la tormenta, el agua
el diluvio, la nube negra.
Va oscureciendo.

La velocidad se va sometiendo
al ritmo de este mortifero palpitar,
el sol de la mañana, se metamorfea
ya no es luna de noche, es luna nueva.

Y allí, en este degradé gris,
es que tu presencia sostiene mi cuerpo,
ahogado, asqueroso, mugriento.
Es así como tu presencia, sostiene la mía.

Con las palabras enaltecidas,
la presencia va desapareciendo
y tu ausencia, es mi ausencia relatada.
El día es de nuevo día, y la noche es medialuna.

Entonces, yo me recuesto. Me escuchas.
Hablo entonces, de lo que me trajo hasta aquí.
Cual comandate de este barco, este yo se jacta:
de su desvalimiento que desautorizado, se culpa.

¿A donde iremos a parar?
Casi, pero me olvidé. Que lo hice.
Desautoricé, ratificando la lluvia.
Calló. Y la presencia emergió.

La ultima vez que dejamos,
me reí cuando la lluvia iba a venir.
El cielo esclareció y la crueldad mermó.
No fui yo quién dijo rotundamente, no.

martes, 21 de julio de 2009

Sh

Silencioso, este acercamiento. Se acerca.
¿Debería? En tal caso ¿Qué... debería?
¿Contarlo? ¿Sentirlo? ¿Vivirlo?

Empiezo creyendo, que nada sé.
Termina siendo, que siempre lo supe.
¿Debería terminar lo que nunca empezó?

Vos sabés, que en este momento
mi vida es muy confusional. Es q si soy
o no soy o ¿qué soy? allí donde vocífera...

¿Y aquí, ahora? Para mi...
Nuevamente, estaré tal vez evitando
que de improviste me encuentre,
el desamparo que no pude evitar.

¿Qué valor? No sabés de que estoy hablando
y siempre me lo preguntaste, lo sospechaste.
Pero evito pensar que tal vez...

y me olvido, pero en el olvido mismo
es que extraño, lo extraño de tu alteridad.
de tu capricho circundante, y lo niego.

Es que si ya no fuera sólo mío,
si lo compartiera, me quedaría sin ni,
sin mi, sin ti. Sin sin sin sin....
En el desemparo de la desesperación,
En el daño de la frustración,
En el dolor de la pérdida.

Yo le solía decir, profecía autocumplida.
¿Es qué debería ser así?
Lo que debo, es admitir que creo
no tener el valor. ¡Hay que decirlo!

Tal vez seamos un par,
mas o menos, de cobardes
incluso, invaluables.

Y quizás, no haya qué decir.
Mucho que hacer.

domingo, 12 de julio de 2009

Un diálogo cualquiera

- ¿Qué te gusta del jardín? Le pregunté, al tiempo que, esperando mi pregunta esbozaba su sonrisa… momento adecuado en el que convirtió con sus ojos vidriosos el oxígeno en purpurina, se parecía el paraíso haber cedido ante su presencia, no titubeó y me respondió:
- Sus colores… -mientras anticipando mi pregunta agregó- a veces me resultan mágicos, yo no soy un hada, ni quisiera serlo, sólo vivo hechizada. Nos quedamos mirando el horizonte, sospechando que detrás de aquel absolutismo quizás todavía restaba una esperanza.
- Mi sueño sería que todavía restara alguna ilusión…
- Yo no tengo un sueño, pero vivo ilusionado.
- Entonces, estás preparado para este viaje.
Me pregunté a que se estaba refiriendo, pero no lo enuncié, preferí quedarme perdido.
- Así es como se hace, así como así, se va decantando el camino. –murmuró.
- ¿Y partiremos juntos en ese rumbo?
- Yo le preguntaría a la brújula ¿Tienes alguna?
- Se han extinguido, de lo contrario, creo que no nos hubiéramos encontrado.
- ¿Me hubieras buscado?
- No me hubiera sorprendido.
- Que regalo más maravilloso…
- El único que no tengo para regalarte –sentencié y la acobije en mis brazos.
Nos quedamos entrelazados hasta que el tiempo se templó y su voz me acarició de un modo tan nostálgico que no pude evitar llorar.
- No llores, que no existe parangón.
- ¿Y si existiera que sería de nosotros dos?
- ¿Existiría un nosotros? Yo me quedaría con vos y yo.
- Entonces, perdámonos otra vez, así tendremos la oportunidad de volver a encontrarnos.


para Ale un final feliz. No te desorientes nene, vive la magia. Perdete.

viernes, 10 de julio de 2009

Amor de vidriera

Ahora que no me engaño, ahora que no me ilusiono.
Palabras viejas, que cuentan historias actuales, de un enamoramiento a flor de piel.


Puede haber tanto detrás de una sonrisa, que ni los ojos más pentratenes lograrían saberlo todo, pero es la sonrisa misma la que seduce los ojos vidriosos, y son ellos los que conjuran la risa.
Te invitaría a bailar los compases más perfectos a cambio de tu risa encantadora. No perdería momento alguno para transparentarte. Si supieras, a veces estos ojos tiemblan al mirarte y en ocasiones, la sonrisa inmutable deja todos los sentidos.
Ayer vi tu sonrisa merodeando mi memoria e inevitable resulto mi mirada punzante, yo quería en mi fantasía desnudar tu monotonía, hacer temblar tus pies en un momento eclipsado. No puedo más, ver pasar tus pasos que nunca vienen hacia mi, mis huellas han quedado siempre alrededor de esa armadura, tosudez que sólo de vez en cuando deja escapar un dejo de tu dulzura.
Yo me animaría a tantas cosas y a tantas más, pero esto no es una declaración de mi amor, tampoco una muestra de mi coraje, simplemente es el reflejo de mi pensar, el reflejo de mi desear y el espejo de mis días recurrentes sin la sencillez de tus palabras, con el eco el silencio.
Pero acaso ¿Tan claro está en una mirada el tesoro más buscado y tan necia sea yo al enroscarme en la sencillez del secreto, y en la medida de lo impenetrable, hundida finalmente en la cobardía de los histéricos?
O tal vez, mi necedad y yo, nos sentemos aquí para encantarnos con tu sonrisa hasta que tu mirada gire hacia aquí.

miércoles, 1 de julio de 2009

De en serio

Que sea de en serio
que me voy y me llamas.

Que sea de jugando,
que al esperar, no me buscas.

Que sea de mil maneras,
pero que una vez sea en serio.

Que no sea, que en serio
has dejado de desearme.

Y allí, donde me llamés
no voy.
Allí donde me busqués,
estoy.

Y aquí,
donde vivimos mi espera y yo
que sea de en serio,
que al fin llames a mi puerta,
cuando yo la pueda abrir.

lunes, 29 de junio de 2009

De jugando

Que sea de jugando,
que te echo y vuelves.

Que no sea en serio,
que no vuelves y mueres.

Que de en serio y de jugando,
se desvele este sueño.

Que no sea de jugando,
el amor que me tienes.

Que sea de en serio,
el deseo que anhelamos.

En serio, juguemos.

miércoles, 24 de junio de 2009

Cualquier semanjaza con la vida real...

Ven, quédate.
Cobijame.
Regocijate.

Vente conmigo,
corazón ahumado,
mil olores perdidos.

Cerca, aquí al ladito.
acómodate junto a mi...

Ahora que respiras,
ahora que me tocas,
ahora que que te siento,
y me siente. Y sentimos.
ahora que ya no se qué hacés aquí
ahora que palabras...
palabras no tengo para ti.

Vete ¡Basta!
Salte por la ventana,
por la tangente,
por la puerta.
Pero salí.
¡No te quiero más aquí!

¡Para para! Regresa
Me olvidé que...
no puedo vivir sin ti.
Vuelve, te lo ruego
yo no quise... no pude.



Fin.

martes, 23 de junio de 2009

Sin terminar de...

Me preguntaba si...
hoy que tenía ganas,
igual que ayer
de terminar la frase.

Ojalá pudiera decir,
lo que no termino nunca de decir.
Ojalá pudiera ilusionarme,
con la idea de...

Es irrisorio, que esta mudez,
que esta insensatez,
que este sin decir que
se parezca tanto a la falta de...

¿Qué te puedo decir,
Que me muero por decir
aquello que callo,
por idiotez, por boludez,
por incertidumbre,
por vergüenza o inoportunez?

Y ahora esta pregunta, que va...
Idolos alicaídos, misterios vacíos.
Realidades ¿verdades?
Es esto lo que interpreto,
de la inocuidad, del vacío...

De acciones, del silencio,
y locamente, de esa mirada.
Hay que decirlo, hay goce ahí.
Deseo aquí, palabras palabras
palabras...

Más o menos,
en el intersticio que cava
la distancia, el interés,
las sensaciones, y este no saber,
se regocija el sin decir que
no diciendo nada,
ha hablado por mi y por ti.

viernes, 19 de junio de 2009

Sin decir que...

Donde el silencio nace,
comienza el invento.
donde la tensión perservera
algo más hay allí.

esa correntada de palabras
que se fugan cuando...
las preguntas que no llegan
y llaman al estupor.

Y aún así no poder, decir que
me muero por decir, que...
y no escuchar, ni oler,
sin sentir, ni caer sin fumar.

inhóspitamente, ya no sé quién soy.
pero quién soy allí, en el lugar
donde el ambiente cruge y las sales
bañan las certeza de las sensaciones.

Y no es tan terrible, claro que no.
Esa evidencia, esa exposición... nunca
ha sido impune y este monstruo ardiente
se ha quedado sin presa, ni sorpresa.

Ferverciente, la inminencia y
no poder decir, finalmente me quedé
con más de una gana de decir que
no puedo decir que esta locura
me está traficando las feromonas
por corporeas dolencias de faringe
contreñida y agujereada.

Tan sólo sin decir que,
tal vez no se trataba de decir nada.
Allí, la primera vez que enmudecí
pero dije mucho más que...
no-todo puede pertenecer a ti.

viernes, 12 de junio de 2009

Nos quejamos de él

Es hoy, un olvido irrestible.
Resulta que un corte,
cuando daba ocupado...
resulta que dos lineas,
cuando no me atendía nadie.
Un incomunicado vestigio,
de "ven aquí" sin ir allá.

Es-pero, dice mi amiga.
Ella puede ahora desesperar.
Dicen, del sentido común dicen...
Me cuenta, él me cuenta
los días, las horas, los cometas,
los soles, las calles, las novedades,
las caricias, los besos, deja siempre
un misterio, deja siempre un tapón.

Con ella, doreamos.
Espero, que podamos... dejar de pedir:
que dejen ese exceso de lado.
¿Es necesario?
Es un mensaje, para los tres.
No entendí ¿Entenderán?
Pues bien, ya dije q eramos tres.
Aunque no es ella, sino él.

martes, 9 de junio de 2009

No hay dos, sin tres.

Ella dijo yo no puedo sola.
El la llamó, interrumpiendo el silencio.
Al menos son dos,
los que no saben qué hacer.

Ahora son tres.

domingo, 7 de junio de 2009

¿Qué hombre?

Retomo los hábitos,
pero no encuentro otra forma
que no sea deshabitando lo cotidiano.
Y sobre las formas. Cuántas.
¿Qué cambiar de este círculo?
La sensación de que nunca existió
otro distinto que el anterior
y repetir que sólo Uno allí
escribió un punto y aparte.

Un segundo, en que la tranquilidad
se desmorona. Un primero,
que se desmoronó. Y puntos suspensivos...
¿Cuándo cayeron los ideales de idealidad?
y con tanto desastre dando vuelta.

Jugaba e incluso escribía,
también bailaba los sueños que
en la ensoñación adolescen.
Nunca me lo había preguntado,
y cada día que lo hago...
o la misma respuesta: ya sé.
o el mismo pasar: em-barullo.
y sino qué? qué de esta angustia
que evito al encontrarme
sosegada y consternada por
el martirio de tomar noticia que desea,
y no saber cómo me desea.
¿Y para qué? Retorna.
Si no hay historia para un olvido
insoslayable. No hay historia,
sino hay poeta. Y no hay poeta...
¿Qué hombre podrar nombrarme
de forma tal, que así el olvido
ya no sea un inevitable?

lunes, 25 de mayo de 2009

¿Qué nombre?

No me crean...
hace tiempo que no hablo,
que no hablo en serio e invento,
invento, pero tienen que saberlo,
yo no miento.

Entonces, pueden crearme.
ofrezco mi texto, mi guión todo,
la presencia contorneada,
la mirada y la voz.
Os digo la verdad. Es hora de que
me crean: así puedo crear.

Sin historias entrecruzadas,
sin revelaciones espontaneas...
¿Qué material...
para apoyar y tallar, cortar
y armar? Una vida, mil sentidos.
Reactivos, opuestos, divididos.

Lo estoy contemplando,
me gusta mirarlo... aunque me de miedo.
Porque el inicio, en este neohorizonte,
es vacío e inminente. Pero no siento,
no siento mas que la contemplación.
Todavía.

¿Qué se puede esperar?
¿Qué se puede plasmar?
¿Hay chances de que no
sea la soledad una acompañante?
elección forzada, que no impide
que luego del paso principal
y fundamental
se fundamente en este recorrido,
la razón primera que tautológica,
de primordialidad a esta elección.

Pero hay sorpresas, a pesar de la incertidumbre.
Sobre la incertidumbre, se sabe demasiado.
Y sobre la sorpresa que enlaza,
¿Qué se puede saber? Si aquí ofrezco,
al acto mismo, la materia prima
para un poeta posible.

martes, 19 de mayo de 2009

Estado

Lugares y decenas,
de lugares y centenares,
de personas y vidas,
con vidas prestadas y
canciones cantadas.

Infinitud, sobre todo
de el tiempo que pasa y sigue
se detiene, en su finitud.
Imaginar. Sólo procastinar.

Fomentar, la palabra misma
la oración perfecta,
el peligro menoscabado
el recanto inexacto.

Una historia, con sus pasajes.
Sus peajes y sus vueltas,
sus pulgas, sus pulgares
estas flechas, aquellos muros.
Los silencios. El teatro.

Inicia, a condición de un fin.
Intevalado, ovalado
premeditado, pero nunca nunca
habitado. Lo terrible de la sangre,
cuando se escapa, vuela,
y no hay cuerpo que la atrape.
Lo menguado del dolor
cuando se circunscribe,
y no hace mecha en la piel.

Lo iracundo de este estado,
más necesario que temible,
lo innecesario del a priori,
que desvía y que coarta.

Son las fauces de la muerte,
indicando al sendero,
las flechas que se pierden...
y los nuevas venturas que
se enmarcan en la linea mítica
de este neohorizonte.

martes, 5 de mayo de 2009

No funca.

Lo que no daría porque hoy
Que me ha sorprendido la osadía
De desear una palabra,
Lo que no daría.

Mas, daría todo si no me contaras
Entre tus cuentas, entre tus sábanas.
Sino contaras entre mis amores,
Las clavijas sonoras que me encantan.

Si pudiera contar, lo incuantificable
Lo incomensurable de este vacío,
Que no es cierto, que es encierro
Que respira cuando no estás, surcandome.

Envilecen, en el olvido la contenida
Palabra que no se deja volar,
Se pierden y desletran, ya no cantan
No disfrutan, no sirven para nada.

Cierto es, que allí no puedo estar
Menos aún cuando aquí se pongan a habitar
Sin hueco, ni estadía este eterno
Suspirar inconexo que devasta mi ser.

No vuelvas a volar, si es para
Despilfarrar amor que no vas a dar.
No cuentes conmigo, si no vale la pena
Divagar, sino cabe de vez cuando…

Mi futilidad e irreprochabilidad,
En la paciencia se deshacen,
Se aburren, se condensan,
No se fugan, y persisten.

En este mundo para armar,
Más malo que conocido
y por las dudas nunca un viaje más allá,
ni más acá, ni se mueve de dónde está.

No eres más de lo que puedo ver,
No soy más, que otra forma
Y ambas, no encajan.
Hable o calle. Haga lo que haga,
Que hagamos, que hagas.


¿Qué alternativa a esta infatuación?
Llorar? Patalear? Quejarse?
Actuar? Improvisar? Malvivir?
Sobrevivir? Cantar? Contar?
¿A dónde vamos a ir a parar?

Ni una respuesta, al desasociego
funesto e incorruptible
que me subsume al subrepticio
e impío entristecer de a poco...

Se va apagando, sino apagan
demasiado pronto
este chispear ahumado,
del resplandor de la belleza.

Lo unico que entiendo
al fin de cuentas,
(afortunadamente)
es que extravié la llave
y la combinación,
mal que me pese (y me pesa)
no puedo inventarme.
ni siquiera de mentirita...
para embriagarme un rato,
más aún, la vida entera.

martes, 28 de abril de 2009

Ya.sé.

yo sabía que esto iba a pasar,
pero no sabía que no saber
pudiera sentirse tan desgarrador.

yo sabía que algun día...
como cada dispersión, yo sabía
y ahora no sé como se llama estar así.

ya sé que repito y repite,
que repetimos. Y asi ya sabemos
cómo sigue la historia.

Quizás no sepa, que vos sabés
y que finalmente ninguno sabe.
que nos movemos y ¿Hacia donde vamos?

Yo sabía que no iba a poder andar
andar libremente por el paraíso
de la devota devoción ideal.

Yo sabía, ya sé que sabía. Pero pasó.
y no supe qué hacer. Me asusté.
me eché, te fuiste... nos perdimos.

Yo sabía para dónde iba...
pero ¿sabés que pasa?
Estoy cansada de escuchar lo que ya sé.

Cansada de escuchar la nada misma,
algún día iba a pasar, iba a llegar el día
que saber, se hiciera tan funesto...

Estamos en cero y divididos.
Ya sé, y no sabía que podías...
desearme así y vivir yo por ti.

Splinter

Hoy voy por ti, y es literal. Voy a buscar y estrujarte, desenredarte y desatarte. Quitar uno a uno, cada botón ... arrancarlos, con desesperación. Con la misma desesperación que me inunda cada vez que me abordar, con la misma pasión que me acorrala. Con cualquier cosa, menos con amor.

Te voy a medir, calcular tu jugada, contrarrestar movida y deslizamiento amorfo, impresivible.... voy a acotar hacia el rincón y ya nada hará que sigas parasitando mi morada. Comerás inocentemente del veneno de mi piel, te morderás las manos la lengua del avasallmiento que causará la tentanción fatal.

Hoy, ya verás. Nada podrá salvarte...
Por intruso vespertino, maloliente matutino, por las razones inconexas que me enconan y encaprichan en la lucha interminable por la independencia impía. ¿Tendrá el mismo a valor cuándo ya no invadas mis días, mi tiempo, mi abrazo, mi amor y mi odio?

Pedazo de rata, olorosa... tu cadáver es insoportable y tus huellas no hallo para quitar tus restos agotados del cuarto que ladea mi bunker psicodélico. A tu tumba, un ritual satánico. A la semenjanza con la realidad, es puta coincidencia.

Fe de erRatas: valga el fallido.

viernes, 24 de abril de 2009

Comandante

me invadés la palabra misma, te instalas en mis ideas y revoloteas como si fuera lo único. Entras por la ventana y corrompés mis conversaciones, implantas la duda y los ensayos psiquicos. Te echo y opongo a tu inudación toda mi voluntad y este exceso que introduce me paraliza y finalmente solo hay un final, mandar el mundo a la mierda y qué tal ni son qué importa qué dirán. Que si estoy loca o soy una idiota, que tenía todo para ser feliz, que soy hermosa, fea, terca o inteligente. Que si río, si canto o lloro, si escribo o borro con el codo...
Y por qué en la espontaneidad de los decires varios, en el atolondramiento de mis trabalenguas mentales se hace hecho el exceso que sanciona: Ni eso, ni nada! Y nunca, es el momento por excelencia para que algo funcione. No marcha... y de este exceso, no puedo hacer ni decir nada.
y de este exceso, no puedo escribir nada. Y de este más, no puedo abnegarme y abyectarlo de mi cuerpo. Me manoseas, no oyes? no escuchas?
Este desarreglo, esta infusión disfuncional y distorsionada, me doblega y cada vez peor y cada vez me da vuelta y vuelta. Se podría decir que sí, que me gusta. Se podría preguntarle ¿Por qué? Y aún así, nuevamente no podré concerbirlo ni racionalizarlo. Y aquí me encuentro, hablando de él y su fundamente, y aquí me autorreprocho los reproches imaginados.
A veces me hace reír, y cómo. Cuando se encarna en alguien... pobre alguien! Te maldigo y repito, pero no hay caso... funcionás solo mientras mis pasos van para allá, estás ahí para hacerme dudar y decirme "allá o acá?" e indicarme y darme órdenes absurdas intrusivas y violentas.
De nuevo, estoy hablando de vos. En cada sesión, en cada momento, y pienso y dudo, y no paro, no paro, no paro, no paro... obsesión de mi vida por tu centralidad, obsesión que mitiga lo fundamental de esta paradoja, no hay piezas que encanjen a la perfección y aquel principe azul, sólo puede ser gris con una lechuga en el diente.
Se percataron, no? Mi síntoma y yo, hacemos una pareja detestable, pero hace tantos años ya que estamos juntos... asi no estoy sola, siempre está él y su corazón oscuro. Y aunque se torne inmanejable... es claro que si no hago nada al respecto, nunca me abandonaría y por eso, nunca es el momento perfecto para que nada marche. Aunque a esta altura, lo digo de una vez quiero el divorcio! y al carajo!

jueves, 23 de abril de 2009

¿Y si de repente el mundo amanece al revés?
las copas de los arboles serían frondosos arbustos
con troncos aaaaltisimoosss
y el cielo sería tierra y la tierra sería el cielo
¿y las plantas estarían en el cielo o en la tierra?
¿dónde estaríamos parados?

Pues bien, ahí estoy yo...
al voltear y verme al revés en el final,
que ya no era principio.
y los colores que ya no eran los mismos,
esa figura categórica e indulgente
que solía caracterizarse,
ahora inescrupulosa y atrevida
con las patas para arriba
y las ideas desbaratadas e irracionales.
en función de la racionalidad
que caracterizaba el mundo al derecho.

Sin embargo,
hay resistencia e insistencia.
¿Cómo a un déspota y pobrecito ser
vas a decirle la verdad en la cara?
¿Cómo se te ocurre?
es que mi mundo además de amanecer al revés
también atardeció, y anocheció.
cuando una estrella pasó bajo mis pies,
supe qué hacer.
Callar.

lunes, 20 de abril de 2009

Después

al pesar de este incierto desconcierto que subyuga las jugarretas propias de una mente dubitativa, al cantar de esta guillotina que divide las opciones entre todo o nada, al caminar de esta mitad desarreglada que hacia ahí se dirige, al contrarrestar y de ese modo, subsumir al inframundo aquellas ideaciones contaminantes, pregnantes y alarmantes, al exagerarse y dejar más aún en evidencia aquello que no quiero evidenciar...
¿Como describir ese fenómeno mental que introduce un "esto es así" que acorrala y comanda en consecuencia las palabras a decir y los movimientos a realizar?
Si entonces, tengo esa sensación inefable de sentirme invadida inexorablemente por esa voz, esa intervención violenta que me arrebata la espontaneidad e impone el cálculo falaz y el punto borde de "hasta acá el placer" y ahora a gozar... ¿Será pues finalmente, un irremediable?
Ahora, que la habla más allá de lo que puedo decir, y ahora que esta palabra ha implementado una nueva distribución del interés y el punto de inflexión, ahora que los puertos se han extendido y las olas no arremeten contra la orilla.... ahora que se finí ya no es una opción, sino un acto... ahora se destangencializa y le pone la canción al silencio brabucón que arrincona temerosa las imágenes espeluznantes de un sinrazón acongoja y deprimido, tampoco maníaco y simplemente dispuesto a vivir... ahora que ya es después, seguir viviendo atravesado.

Se Finí.

las gotas aireadas,
las cumbres trilladas,
los desniveles ambiguos,
las cortinas corridas...
los antares eternos,
los desvastadores traidores;
las formas aisladas, las curvas moradas...
los reflejos constantes, las pinceladas perdidas.
Los dedos añejos, el olor a alcanfor..
las rosas sin espinas,
y la dorada flor.

¿Tanto me vas a contar?
cada objeto y su diseño,
cada palabra y su decir.
cada estribillo y su nota,
cada sentido y su contrasentir.

Gira, gira.
Vuelta, vuelta y vuelta empezar.
Ensayo mental,
peliculiando la paranoia:
puesta en escena triunfal
caminando hacia la meta.

Cortar. Ya corte.

miércoles, 15 de abril de 2009

otra vez?

Ahi va de vuelta
para tu deleite, para mi repudio.
ahi va de vuelta,
revuelta sobre mis pies.
envuelta entre los enseres
y marañosos destellos
de vestigios calculados.

martes, 14 de abril de 2009

No me banco....

Una dosis de mi espanto exagerado, una sobredosis de siniestro silencio o malograda comunicación. Un intento de sublimación, dos veces grito: no respondas a mi demanda.

tan cerca puede ser... tan cerca sintiendo el sudor de los cuerpos, el sonido del jadeo desesperante en una tarde de verano en el colectivo, tan cerca puede ser tan aterrador enfrente del espejo roto horrorizando la silueta de este cuerpo esquizofrénico. Tan cerca al oído puede decir tantas barbaridades y obsenidades... tan cerca te escupen, te putean ... te empujan.
tan cerca que siento tu goce, tu placer, tu llanto, tu alegría.. tu astucia, mi desengaño. ¿Tanto?
¿Es necesario tan cerca...? qué exceso que me arrebata.... ¿Por qué no te das cuenta que tan cerca puede disipar este amor y este deseo y ser tan lejos? ¿Por que no me doy cuenta q de ese lugar sólo busco ser rechazada, expulsada?
Y ahora, este espanto que ahuyenta a los odiosos roza-cuerpos, y ahora este devenir turbulento, catarata de saparrastroza lluvia y aluviones de acoso y rompe-huevos, consecuencia de este roce infructuoso y desagradable te este hedor y esta sed, de este cuerpo corrompido y de ese otro pedazo de carne.
Dame amor, amor amor amor y palabras... para sobrevivir a esta tortura ¿Tanto me vas a contar? ¿Tanto....? ¿Cuanto más cuánto menos? Parte a parte, circulará y pedazo a pedazo este cuerpo degradado se entregará... y nunca todo, y sino nada. Asi no se puede ser feliz....
No me banco tu yo... ni yo me banco. Con cartas así.... Quiero que vuelvan a repartir!
No entro en el juego, juego desquiciante y obsesivo, complicado y aturdidor, excesivo y complaciente.... escribo este más, que a veces es menos.... tanto menos e imposible de comandar y reducir, tanto menos que me separa y aleja de esta sexualidad impudica de esta éxtima, nuevamente, confesión.


Ahora, aquello que no querían saber... lo q no quise oír. Lo que no debí escuchar...
catarsis

lunes, 6 de abril de 2009

asímegusta

hoy no sé qué escribir
no tengo que hacerlo.
hoy no viene a mis pensamientos
una frase complicada.

Hoy ya no es complicado.

lunes, 16 de marzo de 2009

Viernes unotres.

Loqueyoquieroesmuycomplicado.
Pero obvio. Un poquito de allá, y un poquito de acá.
Sólo exagero, por dramatizar y cuando
esto es una gran comedia, no lo entienden. No.
y por que una comedia?
Preguntarme que quiero, es absurdo.
Que conteste y diga aquello que quiero, también.
Pero no diga más señor,
porque me convoca a donde no voy a ir.
yporcomplicarlanadamas.

Ella me dice, es la yeta!
y yo le digo NO: soy yo.
Ella me dice, son los ellos.
y yo le digo SI: hay q matarlos a todos.
Hoy es viernes unotres.

pero no estoy hablando en serio,
aunque estas sean mis palabras.
las tomé prestadas. Y no responderé, por ellas
NO! Sólo poresteenriedo y por esta
gran gran gran gran gran gran
idiotez y condición humana, cómica hoy.

es que cuando es una seguidilla, una tras uno tras
a veces me indigno, pero poralgunaextrañarazón,
me rio, y por no complicarla y por no darle consistencia
a los misteriosos poderes del más allá.
Tal vez sólo sea un poquito de azar
y otro porquito estacomplicación.

No cesa de no escribirse...

y vos que creías, tantas cosas creías... ahora que esas cosas cambiaron de coordenadas y los rompecabezas devinieron rompecorazones. En un episodio inolvidable, en un cachetazo irrefutable lo irreversible se hace omnipresente y aunque quieras... quieras olvidar, cada vez se hace más fuerte esa voz inaudible que penetra fuerte y dura en cada molécula de este drenaje cerebral.
Aquella complicidad y esta ausencia, su expresión, su sonrisa, sus miles de caricias. El abrazo y el olor hoy imposible, se fueron y aquello que creías q no iba a pasar jamás... a pesar de que fuera inevitable, la carta siempre llega a destino: para despertarte y espuluznarte. Y primero, la negación... no puede ser y no vas a dejar que esto sea una realidad y vas a insistir con tu añeja creencia y "esto esto... no está pasando". Pero es un hecho innegable que pasó, y esta angustia está presente para recordartelo y de ahora en más ¿Como volverse a dormir? ¿Cómo dejarse engañar?Sin que el miedo no aceche, sin que la perdida ya no sea consumada...
Pero vos estás acá y este vacío también. Sin nombre... y ya nada entendés. Pero algo sabés. Algo está cambiando... y no podés perderte el tren. Sin embargo, te evadís a otra realidad maquinaria, a otro plano psidodélico y tumultuoso. Si quizás tengas suerte y tal vez, puedas hacer algo con tanta maleza a costa de esta certeza.
Y aunque este vacío imposible de tapar, se llena y rellena... todo es pasajero, como cada tormenta y descubrís que es mejor en la tempestad quedarse quieto y por la corriente dejarse arrastrar, la suerte está echada. Pero ¿Sabrás cuándo será el momento de volverte a dormir?
Acaso este fantasma que camina y se hace agua... se diluye en sal ¿Será capaz de sentir el fuego y volver a empezar? Más aún, redoblando la apuesta... ¿Lo hará?

sábado, 14 de marzo de 2009

Ambulante

y a pesar de este vacío incómodo (a veces doloroso)
voy por la vida, cual peato por la acera,
con la frente marchita y la mirada augereada.
Si algo es inexplicable, esto es.
Lo sé. Ya lo sé. No voy a volver de donde salí ayer.

Pero oscilando de vereda en vereda,
cruzando la calle y volviendo por la esquina de atrás,
como un fantasma me deslizo, me río me río me río.
Deambulo, penetro en sueños y quito las notas,
cambio la melodía y distorsiono la guitarra.

La urgencia, penetra y coarta la vidas,
los pasos, la ausencia, el pretexto, la excusa..
Ahora que no hay nombre sólo piel y sensación,
No hay nada que tenga q hacer, que no lo sepa...
sin embargo, algo no sé y este vacío es su ser.

No debieran haber nacido estas palabras,
que como todas a veces dicen la verdad,
a veces dicen de más o de menos.
No hay lugares escondidos, no hay misterios que revelar...
sólo este silencio de más y lo que acontecerá.

jueves, 12 de marzo de 2009

La carta siempre llega a destino...


Hace tanto aunque no tanto, que no escribo...
no escribo cosas lindas,
Recuerdo una de las primeras veces que no las mantuve en el anonimato y a su destinatario confíe... no fueron bienvenidas, ni siquiera acogidas. Aquellas primeras letras, cual primeros pasos de infans entusiasmado, fueron desechadas, rechazadas... como cualquier residuo insignificante, tras ellas marcharon mis lágrimas y mis ilusiones, nunca más engendradas en una carta de amor.
Luego, el tiempo y la vida, propicieron nuevos encuentros y otras cartas y poemas, y canciones, besos, cursilería le (mal)dicen. Eran tiempos de adolescencia, como siempre elegí no elegir, y nunca más volvió a suceder... una ilusión que no se diluyera fugazmente como cualquier estrella, que no se apagara con el ocaso de cada día...
Pasaron varios años, y fue muy difícil asumir que nuevamente hermosas palabras tenían un destinatario que las sabía leer, que las acogía sin más. Fueron tiempos espinosos, pero supo cuidarlas, diría rescatarme de tanto pudor y temor. Sin embargo, semejante paseo por el cielo y luego por las llamas del infierno, no alcanzaron para embarcarme nuevamente en el sueño de la bella durmiente. Por esa época, también escribía historias de amor inventadas, imaginadas, vividas, contadas... el fin siempre era el mismo, rescatar de las tinieblas la ficción olvidada y pisoteada.
Hoy podría ser una causa, al menos seguro de esta sinceridad, que ahora aunque no sepa, se deja pertrificar en una forma gramatical. Cuantos capítulos que me perdí y me olvidé de imaginar algún final que resolviera este conflicto existencial.
No puedo dormir, aunque quiera acostarme en tu hombro y soñar... a un lado y abrazar lo evanescente de este preludio que prometía comenzar y el cuento sin final, sin principio ni estribillo se quedó, naufragando como mis palabras y mis pensamientos en el ritual que comanda este vivir descreído, y que siento me impide dejarme navegar... al comandante.
Aunque las mejillas se sonrojen en una publicidad inusual de esta "éxtima" privacidad... quizás las sepa leer y encuentren su lugar.

martes, 10 de marzo de 2009

Cree


todo comienza cuando empezás a creer;
creelo, creerla, creerte, creyendo...

en una ilusión, una nacimiento, dos vidas y tres letras. Dos Frases, una canción... cuatro melodías.
pasos en pases y despacio, traspaso de la ventana al cielo y subiendo y sigue.

3 puntos enfilados, uno atrás del otro en fila india, uno de cada color,
más esos intervalos de respiro, más un signo que se va diluyendo.

No todo, es siempre no todo... y esa hermosa creencia,
que te da confianza, espanta el miedo y hacia ningun lugar te invita a saltar.

creencia prejuicio van y vienen,
perjuicio suscitado que "frustra, ahí donde pedía
y no era más que palabras.
Una presencia que en el silencio, será notada".

Así que creo...
tal vez con el tiempo, con entusiasmo.
quizás en el fondo frontal, no sea eso lo que deseo...
y nunca es eso, sino lo que se esconde: detrás de esta canción desesperada.
y más allá de lo que oculto, tengo o no tengo, digo o callo.

jueves, 5 de marzo de 2009

O

Al fin caí, despues de enuciar y ahora puedo decir
que se puede reír y llorar, sin necesidad.

De otro modo,
también se puede reír o llorar, sólo hay que elegir.

Vivir o morir, lo mismo da: vamos a existir igual.

lunes, 2 de marzo de 2009

Historia de un fantasma

Desprenderse y encontrarse, de lo que aquí mismo te petrifica y lo que allí mismo de un momento a otro se trasluce o se oye. lo que no quiere escuchar, lo que no quieres ver pero aún extraño te concierne, y en qué medida te cierne, recorta y bordea, cuál collage de lo innecesario, cuál certidumbre desgarrada.
la cobardía cuando valiente no se prende en la guerra de los pregnancias, en la lucha por la palabra o normalidad. Cuando de repende, sé sabe hacer y es la certeza sin gollete ni razón que estabiliza en un acto solemne... por qué viene a molestar aquí y derriba tan ferozmente esta pequeña obra de arte?
¿Será acaso así como se siente enloquecer?

Ideal del libertad, que el precio intachable nos vale en la piel, lo que más tétrico puede ser en el saber que se desconoce y sin embargo, concierne. "que no duerma mucho, no quiere decir que este siempre despierto". Os voy a contar una historia...

Es una noche calurosa, como la de este domingo pongamosle, sólo se oye el ruido del ventilador, una y otra vez, mientras el reloj le marca el ritmo tic y tac, tic y tac. Hay una persona acostada en su cama que no para de moverse de un extremo a otro y hace siempre el mismo recorrido, un mosquito zumba tse tse le muerde la piel que con estas temperaturas no puede más que ser salada.
Las horas pasan y el escenario es el mismo, está oscuro y sigue la misma orquesta tocando la misma canción. Finalmente, la vez levantarse se dirige al baño y cuando sale, antes de volver al desganado insomnio, va por un vaso de agua... pero que sucede? cuando está por abrir la puerta, un sonido fuertesímo se oye, también un perro ladrar sin parar... se queda enmudecida e inmovilizada: asustada, detrás de la puerta preguntándose ¿Qué carajo...? y todas las semánticas posibles que expliquen en una cabeza que desconoce completamente lo que allí está pasando, efectivamente lo que tiene lugar en la inmensidad de las paredes.
Finalmente, temblando y sigilosa, abre la puerta... se anime a prender la luz del pasillo, lo recorre hasta la otra punta, despacio, muy despacio, está extremadamente atenta a los ruidos inhospitos que podrían sorprenderla, llega a la escalera se queda mirando... y mira... y mira.... y escucha, y escucha y escucha... no habla, no camina, y sólo piensa en el miedo y en la soledad de la penumbra.
Al cabo, cuando toma coraje, ese intermitente que le alcanza para unos cortos pasos... baja las escaleras, se sabe que allí no hay nadie y sin embargo no puede dejar de pensar en que allí puede haber alguien y como un niño, para perder el miedo, ir a verificar que detrás del velo... no hay nada.
Llega a la planta baja, el perro se acerca y la olfatea... al fin, se relaja. Pero luego piensa "y si aparece alguien o algo... ?" para que se entienda, metafísico si quieren. Vuelve a mirar al perro... él sigue mirando, tampoco entiende demasiado que está pasando. El suspenso invade la escena y no puede más que quedarse esperando, expectante a ver si alguien aparece que no sea otra vez, profecía autocumplida y allí donde se suponía debía generarse un encuentro... otra vez el malentendido fantasma tiño de terror y oscuridad el designio, lo único que restó fue otra vez... quedarse esperando a ver cuando alguien se decidía a...


Fin.

domingo, 22 de febrero de 2009

es solo una moderna forma de ser...

si todos tenemos miedos
¿Como vamos a tocarnos?

el azar que liquida la sabiduría,
que escondida se arruina en el baul,
de cada auto que goza, de que cada
hombre que se horroriza.

no somos nosotros,
¿Quién es?

no es posible prevenirse y asi arriesgar,
ahora que pierden sentido los adjetivos
ahora que cambian los valores, y las tazas
con las que desayunamos cada mañana.

que he hecho yo para merecer esto.
¿Pensar que todo es posible domeñar?

la compulsa que insiste, por la satisfacción.
y cada día más solitarios, los fantasmas nos hacen,
cada vez, que el sueño se tarda en venir, cada vez
que tardas en venir... ilusión.

Sólo proyectos individuales
¿es que te has puesto a pensar si tal vez hubieras...?

arrepentirse, no tiene gollete.
Si uno no es, es el destino. Hoy, no existe mañana.
ni ayer. Hoy, naufraga el amor.
hay muchos culpables, pero nadie se hace responsable.

y tu,
¿que guión representarás?

las vidas las compramos hechas, y es más fácil
tan sólo con papel, pagar la deuda que contraimos
al nacer y al tener un nombre por el cual ser.
ahora es el momento, y probablemente tengamos miedo.

jueves, 19 de febrero de 2009

This crazy life

el tren que encadena a velocidad insoportable todos los miedos que rondan aullando, supongo que espararé en la estación. no queda más que el modo suponer, cuando en movimiento está este loco acontecer. vienen y van, en presencia y en ausencia, cuándo gozaré de la tranquilidad...
es que si no funcionara a mil y pudiera desconectar más seguido este pensar, que se motoriza con los ecos al costado, que se desorienta tan rapidamente por la debilidad que lo caracteriza y esta poca cosa, resto de los momentos y residuo de lo imposible.
en la mañana, maraña qué será "llevarlo a cabo" acallando las voces... ¿donde está la mano que le da cuerda a esta macabra cajita musical? Cercenar, pues no hay opción. no temer perder, y en definitiva darlo por perdido, y así poder tener... un buen encuentro, ese que anhelo... ese que no me encuentra y no busco.
porque ya no somos los mismos desde hace rato e insistimos allí donde sólo se trata de dejar existir una cosquilla... mil endorfinas. de cabo a rabo, se sabe lo que hay que hacer... ¿Pero es este el sendero de esta sensación?
y si quisiera, por unica vez quisiera, romper este guión e improvisar... cómo empezar sin enmudecer. aqui se relanza otra vez. pues correr el telón y ya no hay nada que hacer.

lunes, 9 de febrero de 2009

(des)Orden

Dímelo,
música para mis oídos,
agua para mi sed.

Cuéntamelo,
placer a mis sentidos.
Besos en la piel.

Convenceme,
y aquí me quedaré
adorándote.

irrepetible

esta eterna necesidad de racionalidad, de reacia ímpetu por conocer... por llenar el vacío con la "pendencia", sin tolerar la incertidumbre del comiezo, del principio. Un nacimiento poco vigoroso y lleno de angustias y llantos, por la entrada a la dimensión desconocida.
explorando, las palabras exactamente idoneas para en lo concreto formular una pregunta irrisoria, absurda. palabras que como agua vagan dilapidando en la mente, los millares de desvanecedoras ideas y racionalidades. Pero allí me lanzo, sin a priori... sólo con incertezas y desconciertos a curiosear el alma humana, a preguntarle a las pupilas azules, por las mentiras y las verdades, los dolores y las alegrías, de este mundo... del pasado, presente sin salida. Como extraño ahora, tantas cosas del norte, y de este ayer... como de ahora, que aún tengo miedo de abandonarme y dejar librado al desamparo, muy atento, de todos esos actos... únicos.

viernes, 6 de febrero de 2009

Sin explicaciones.

ahora desconecto,
voy y vengo.
Vuelvo, hacia donde no estaba.
y no sabía que estaba.
¿Donde? Volviendome loca.

teje, teje,
tejedora maraña de veladas
y desveladas confusiones.
Despeje, sedando
las neuronas, desnudando
las palabras, las sílabas
oscilando....
entre allá y acá.

No importa dónde,
mientras el tiempo pase
y yo con él me deje llevar,
por la verdad y la mentira,
sobre todo por lo que siento,
menos lo que pienso.
Si pienso, equivoco.
Si caigo... tengo la certeza.

y otra vez,
no hay retorno.

martes, 3 de febrero de 2009

Ur

donde espero, equivoco. lo que espero, de la confusión ... equivoco. Actúo y equivoco.
brújula marchita que equivoca los pasos y en la desesperación me acompaña.
conjugación insignificante que trastorna mi vida, y otra vez a esconder los fantasmas en el placard.
resolver, sin contratiempos, las urgencias que imperiosa, abnegadas, cegadas imploran por un fin.
carteles luminosos que esconden las señales alternativas que los kilometros le regalan al tiempo descubriendo un espectáculo natural.
quiero todos sus colores y todos los blancos... y es tan terrible poder perderlos, sin tenerlos.
y cuando pasó, ya jugué. no importa cuál fue el resultado.
seguramente, volví a equivocar y ya nada volverá a ser como antes.

miércoles, 28 de enero de 2009

Arriba

Camino, hacia arriba alto donde yacen los restos... descansando, de una cultura, de un pasado en las venas que retorna en estos quinientos años, que el sol ilumina y el viento lo cuenta. No es un secreto que en estas ruinas de presente, un pasado nos atrape.... y que el pasado personal se olvide de volver.

La variedad, las sonrisas, los colores.. todo da vueltas mientras nos quedamos quietos en la cima de una montaña, aquellas huellas y estos pasos, tatuan sus vestigios en la piel tan cerca del sol, tan alto en los metros.

Vuelvo, aunque todavìa estè aqui, donde quedara mi pasaje, donde el pasaje quedara en mi.

y què serà... serà.