domingo, 6 de julio de 2008

A mi no me vengas...

Para los que hacemos tanto que no paramos de hacer aunque no hagamos, haciendo. Maldita "h" que enmudece al capitán que comanda este hacedor movimiento, con sus sonidos-silencios, con sus mudas de ropas, a mi no me vengas...
Porque es imposible para nosotros los activistas contastes y apresurados, ir por la vida sin repudiar "Eh! No puedo no hacer nada. No puedo quedarme quieta" contraproducente consecuencia moviendo los pensamientos de acá, para allá, convirtiendo el tedio en un sinfín de hipotéticas teorías del "será que debe estar...". «Previsibilizando» como siempre cerrando.
Si nada no puedo no hacer, si su consistencia he de arrancarle, fu..fue..fuera! Off the record: piripiripipipii... iiiiiiiiiiiiiiii. Moverse, por incomidad no implica cambiar. Moverse, por "necesidad de hacer" (Castigo castigo castigo!!!) no implica implicarse. Por lo que, tampoco terminan importando las justificaciones. A mi no me vengas... con explicaciones.
Seré realista, como siempre déspota en esta controversial comedia dramática, de qué se trata innovar sino con lo que hay, y si tengo tres palabras, a saber, "no hacer nada" mejor drenar aquello que está de más en pos del placer y aprehender "hacer nada". A mi no me vengas con esa cosas de los límites, porque yo no te lo respeto.
Someterse a aquellas indomables batallas que se prestan al entretenimiento de la mente, castigan y esclavizan al cuerpo rebelllllllllllde -con muchas "eles" para que rebel y de se separen vía muralla letrada-. Un día había dicho yo que cuando uno se encontraba bien no tenía razones para escribir, no diré que descubro o lo diré literal, nunca es creación que no haya sido creada, pero si este mundo no es otro más que el que me creo y a la vez me crea ¿Quién va a crear en mi mundo sino yo, simultaneamente recreándome? ja! a mi no me vengas...
Entonces, en mi mundo, la creación es posible, gracias a que por suerte no puedo conocerlo todo. Aunque ingenuamente probablemente de modo inconciente, aspire a... en el mundo de los Otros, serán otros los próceres creadores de libertad, pero si me creo que creo, puedo creer en crear y crear y creer también en esto que creo y me crea por propiedad extensiva. Con aquellos que creemos en que las cosas que creemos que creamos, son más o menos, compatibles y nos damos el crédito de haber creado algo en lo que creemos. Bleh... simplemente es otro modo de hacer nada.
No hay consistencia más que contenedora de sentidos, sin más: insensatos. Yupiiii!!!

No hay comentarios: