que la superficie de tu cuerpo
sea tan permeable
de modo que no sea necesario
que mi lágrima
llegué a tu corazón
para sentir mi ardor.
que estos contornos,
bordes de mi prisión
se estiren hasta tus manos
y puedas sentir
las llamas que aquí
se prenden con tu voz.
que no sea hielo,
tu agua dulce que purgaría
mi hastío y le daría
a mis sueños,
más que una cama
alas, para volar.
que lo que espera,
al fin nos toque
la piel entera y cada
poro, rincón
de mis besos....
con lo que a mi me cuesta
cariño,
que se entienda
que no exagero
ni desespero
sino que así es sólo
como yo te quiero.
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