lunes, 23 de julio de 2012

Tramando V


Mara decidió. Ella quiso hacer de su vida una antioscuridad. Deseó fuertemente que aquello todo que le molestaba empezaría a cambiar, pasito a paso. Es que es difícil pensar una vida que no esté en referencia a otro, el punto es qué otro estamos construyendo, porque si entender la realidad es pura subjetividad, aquel este u otro que veo que escribo, al que me refiero no puede ser mas que en gran parte la forma en que uno lo lee, desde dónde y exactamente el lugar en qué lo ubica. Entonces, Eugenio, todos los hombres de su vida, cumplía un papel protagónico y ya no quería más eso, no todo eso en realidad, es imposible prescindir totalmente del otro. Quería dejar de ser hipócrita consigo misma, y dejar de calcular cuándo sacar el turno con el médico porque podía llegar a verlo a Eugenio o tapar los baches de su silencio con actividades estúpidas que ni siquiera sentía que las elegía, es más... ¿Estaba eligiendo a Eugenio?. Es que ella sabía que él no lo veía así, sabía que ella no era una “prioridad” para él, que en su vida ella era la excepción y no la regla. Descubrió que el secreto estaba en la ausencia, aquello que tantos hacen sin querer ella lo tuvo que anticipar. Y el punto fundamental, es que después de todo, detrás de tanto misterio que encarnaba la vida de él, en realidad no hay nada. Nadie. 

Todo muy lindo… pero ¿Cómo se hacía? Como si fuera tan fácil camiar el eje de referencia, dejar de hacer, comenzar a sentir... dejarse llevar. Empezó por elegir qué actividades extracurriculares mantendría y cuáles no, se imaginó en cómo se encontraría en esos momentos de “ausencia”, sin nada qué hacer… ¿Qué hace la gente cuando no tiene nada qué hacer? Ella solía encender el ventilador mental y comenzar a darle rienda suelta a sus insensatas fantasías idealistas, pero con un desenlacen masoquista, sin duda; se daba cuenta que así no hacía más que seguir ubicándose a partir del otro, y no por ella misma.

"En este mundo, que lugar no nos ha otorgado a priori, armarse uno… un nombre, y alternar el orden centrífugo y centrípeto en un vaivén armónico".

2 comentarios:

Lunática dijo...

Me gustó, pero necesito adentrarme en la trama...voy a leer las anteriores!

reina.momo dijo...

Me gustó :)